Con 247 parejas reproductoras censadas en el año 2001, Castilla-La Mancha cuenta con el 23 por ciento aproximadamente de la población nidificante de buitre negro de la Península Ibérica y con el 16% de la población mundial, que está cifrada en torno a unas 1.600 parejas reproductoras.

Tras el descenso de poblaciones sufrido por esta especie, calificada como vulnerable en el Catálogo Regional de Especies Amenazadas, a principios de los años 90, la evolución de las poblaciones de buitre negro en Castilla-La Mancha puede calificarse de positiva, ya que se están manteniendo estables, con un ligero aumento en el número de parejas reproductoras. Así, se ha pasado de las 217 parejas reproductoras que había censadas en el año 97 a las 247 censadas en el 2001. Dentro de esta evolución positiva, hay que destacar la aparición en el año 1999 de una pareja nidificante en la provincia de Toledo, la única hasta la fecha.

De las 247 parejas contabilizadas el pasado año, 111 se encuentran en el Parque Nacional de Cabañeros, 135 se distribuyen por la Sierra de Canalizos y Valle de Alcudia (Ciudad Real) y 1 pareja en la provincia de Toledo (Zona occidental de los Montes de Toledo).

El buitre negro es el ave de presa más grande de Europa. Se trata de una especie necrófaga que necesita para satisfacer sus necesidades tróficas de grandes superficies de terreno. El buitre negro es especialmente sensible a la alteración de su hábitat, lo que unido a sus características reproductivas (baja productividad y elevada edad a la que alcanzan la madurez reproductora) hacen a esta especie más vulnerable ante las amenazas que pesan sobre ella.

Factores negativos

Los principales factores negativos que amenazan a las poblaciones de buitre negro son, principalmente, la alteración y destrucción de su hábitat, las molestias por actividades humanas durante el proceso reproductor, la mortandad por electrocución en tendidos eléctricos, envenenamiento o disparos, y el descenso de las posibilidades alimenticias.

Con el fin de continuar la evolución positiva de esta especie y en cumplimiento de la Ley de Conservación de la Naturaleza, la Consejería de Agricultura y Medio Ambiente ha concluido el borrador del Plan de Conservación del Buitre negro en Castilla-La Mancha.

Este texto ha sido estudiado por el Grupo de Trabajo del Medio Natural del Consejo Asesor de Medio Ambiente y en fechas próximas será sometido a información pública y al dictamen del Consejo Asesor de Medio Ambiente, como pasos previos a la aprobación definitiva del Plan por el Consejo de Gobierno de Castilla-La Mancha.

El Plan define las zonas de importancia y las áreas críticas para el buitre negro y contempla actuaciones tendentes a reducir la mortalidad no natural de estos animales. Para ello, se establecen diferentes medidas como la corrección de tendidos eléctricos y la vigilancia de las zonas de nidificación y alimentación para evitar el uso de venenos.