Los propietarios de la central nuclear de Zorita (Guadalajara) no consiguen reparar la central y hacer que funcione dentro de los parámetros exigidos por el Consejo de Seguridad Nuclear. Ecologistas en Acción solicita que no se ponga de nuevo en marcha la central, puesto que supondría un gran peligro.

Un nuevo incidente retrasa la puesta en funcionamiento de la planta por tiempo indefinido. La caída accidental de un tornillo dentro del reactor, en tareas de mantenimiento y recarga, es otro incidente más a añadir a la lista de deficiencias de esta planta obsoleta.

Este hecho, además, deja de manifiesto la escasa cultura de seguridad característica de los propietarios de la central nuclear, y la falta de sensatez del organismo encargado de la seguridad nuclear, el CSN, cuyo papel es minimizar los incidentes, accidentes, problemas, etc..., para lo cual se ha especializado de tal forma que a los grupos ecologistas nos deja perplejos, al pensar en manos de quién estamos.

El nuevo incidente es de una gravedad manifiesta ya que las labores de extracción de esta pieza dentro del reactor pueden complicarse sobremanera, y reflejan la falta de profesionalidad y de seguridad que reina en torno a Zorita.

Ecologistas en Acción solicita por tanto que no se ponga en marcha la central y se proceda a su cierre definitivo, que estaba programado para abril de 2006.