Ecologistas en Acción considera desafortunadas las declaraciones de la Comisión Nacional de la Energía

La CNE ha pedido que se supriman las compensaciones a la energía eólica  
(La Verdad de Albacete, 28 de Enero de 2.002)

Ecologistas en Acción considera muy desafortunadas las opiniones de la Comisión Nacional de la Energía (CNE) pidiendo que se supriman las compensaciones a la energía eólica. Acusa además al organismo de haberse vuelto el portavoz de las grandes compañías energéticas.

Ecologistas en Acción considera muy desafortunadas las declaraciones de la CNE en contra de las bonificaciones que en la actualidad cobran la energía eólica y que ha permitido un rápido desarrollo de esta fuente de energía en nuestro país. Para la organización ecologista, esta fuente de energía, además de tener un impacto ambiental reducido, es el único freno efectivo contra el crecimiento desmesurado de las emisiones de gases de efecto invernadero del sistema energético que han crecido muy por encima de lo establecido en los compromisos de cumplimiento del protocolo de Kioto. Además es una fuente de energía autóctona, que garantiza un cierto grado de autoabastecimiento energético en un país muy dependiente, es intensiva en puestos de trabajo, distribuye las instalaciones de generación por todo el territorio con su asignación de rentas correspondiente y ha tenido una evolución tecnológica muy interesante en los últimos años.

Es ridículamente falso, y prueba el desconocimiento de la CNE del campo en la que teóricamente debería ser máxima autoridad, que la energía eólica disminuya la calidad de suministro, como lo prueba el hecho de que los apagones eléctricos (que no supo prevenir la CNE) se producen en lugares que no coinciden con los de producción eólica.

Ecologistas en Acción acusa a la CNE de utilizar un doble rasero a la hora de criticar los apoyos públicos y nunca ha manifestado ninguna crítica otros de mucha mayor cuantía y duración en el tiempo. A título de ejemplo la CNE juega a ignorar que todos los años siguen pagándose más de 78.000 millones de pta para la moratoria nuclear. De manera que por unos activos que en 1984 valían 460.000 millones de pta, los usuarios de luz ya hemos pagado más de 1,01 Billones y quedan pendientes de compensar 513.000 millones. Para la CNE, tan sensible a apoyos públicos que distorsionan la competencia entre fuentes energéticas, estos apoyos que duran desde hace casi 20 años a unos activos que nunca produjeron un kW-h no le resultan sospechosos. Tampoco la nueva CNE criticó los Costes de Transición a la Competencia que fueron rechazados por la UE (y en el que se intentaba garantizar especialmente a la energía nuclear que no podía recuperar costes e un sistema competitivo), ni la cobertura limitada del riesgo nuclear, ni la actuación del gobierno para construir el cementerio nuclear de Trillo, ni el abuso de la utilización de las declaraciones de utilidad pública para el crecimiento de la infraestructura del gas...

A juicio de Ecologistas en Acción, la CNE, como el Consejo de Seguridad Nuclear y otros organismos supuestamente técnicos designados por el Gobierno, vienen actuando como verdaderos portavoces de las grandes compañías energéticas y perdiendo la supuesta neutralidad que debería presidir su actuación.

 
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