La casualidad ha querido que en estos últimos días el río Tajo haya visto aumentado su caudal enormemente a su paso por Toledo. Las nevadas y lluvias que han regado por fin las tierras de Madrid, Guadalajara, Cuenca y Toledo han obligado a la Confederación Hidrográfica del Tajo a abrir las compuertas de los embalses, con lo que el nivel de las aguas en el cauce ha aumentado mucho.

Tras varias semanas de sufrir el lamentable espectáculo de un río cubierto de espumas y de recibir la explicación por parte de la CHT de que ello se debía al incremento del caudal y al efecto de los saltos en los azudes, cualquiera puede comprobar ahora que corriendo mucha más agua que en días anteriores hay menos espumas. Incluso, en algunos tramos, éstas han desaparecido totalmente.

¿Milagro?, ¿será que la CHT ha dado con los causantes de los vertidos que niega que existan, pero que reclama sean buscados por los ecologistas?. Nada de eso. Simplemente ha ocurrido lo lógico si atendemos a las verdaderas causas de la aparición de espumas y no a las que la CHT quiere hacernos creer a todos. Al haber más agua en el río, los contaminantes y, en especial, los principios activos de detergentes y jabones que hay en las aguas mal depuradas se diluyen y, por mucho que se bata el sucio líquido que transporta el río, apenas se forman espumas. Mucha agua y poco jabón, igual a menos espumas.

Una vez más, frente a la desinformación y la manipulación, la madre naturaleza y la lógica de las cosas acaban poniendo a cada uno en su sitio y permite que cada cual se pueda formar una idea exacta de lo que le pasa de verdad al río Tajo y de lo que hacen los responsables de su gestión por él.

Al parecer, ayer a preguntas de periodistas el Presidente de la Confederación Hidrográfica del Tajo calificó de demagógicos los argumentos de los ecologistas en relación a este problema. Nosotros le contestamos con hechos y explicaciones verosímiles. ¿Quién hace demagogia?. De momento nos preguntamos si alguien ha visto físicamente el informe que los técnicos de la CHT han hecho estos días sobre el problema de las espumas. Y, si de verdad existe y ratifica lo que dice el Presidente de la CHT al respecto, ¿cómo es posible que el Plan Hidrológico del Tajo afirme, como ha demostrado Ecologistas en Acción, que el origen del problema de las espumas está en la contaminación del río?.

Hoy en las riberas del río se ve mejor que nunca depurar es necesario, pero no basta, y si por el Tajo bajaran más aguas limpias de cabecera el problema de la contaminación disminuiría. Si al rácano y poco creíble Plan Integral del Tajo que la CHT se propone aprobar le añadiéramos mejores objetivos de calidad de la depuración, un plan de ahorro de agua en regadíos y abastecimiento, la liberación de caudales en cabecera y dinero, el río sí que se recuperaría integralmente.