Ecologistas en Acción de Castilla-La Mancha ha lamentado la actitud mantenida por el PSOE y el PP de la Región con respecto a la enmienda crítica al Plan Hidrológico Nacional (PHN) que el pasado jueves se debatió en el Parlamento Europeo y les ha acusado de «enfrascarse» en una «guerra dialéctica por los fondos europeos» en lugar de preocuparse por su viabilidad ambiental. A través de un comunicado, la organización ecologista critica que el PSOE y el PP de Castilla-La Mancha, «lejos de plantearse la viabilidad técnica y ambiental del PHN y su impacto insolidario con determinadas comunidades autónomas, entre ellas Castilla-La Mancha, se hayan enfrascado en una guerra dialéctica por los fondos europeos».

En opinión de Ecologistas de Acción, tanto el Partido Socialista como el Partido Popular «han planteado una polémica de tintes meramente económicos y políticos que poco tiene que ver con la solución de los graves problemas de gestión del agua que tiene Castilla-La Mancha».

Además, califica la abstención del PSOE en el Parlamento Europeo de «grave incongruencia», que «sin duda, incidirá en una pérdida de credibilidad ante las organizaciones ecologistas y la sociedad en general».

Ecologistas en Acción anuncia que, dada la parte que se ha aprobado de esta enmienda, pedirá a la Comisión Europea (CE) que no facilite financiación europea para proyectos de trasvases y que mantendrá el seguimiento de los referidos a la construcción de embalses, además de solicitar que no se financien aquellos que afecten a la Red Natura 2000 o produzcan impactos ambientales graves. Por último, la organización ecologista convoca a la sociedad a mostrar su oposición al Plan Hidrológico Nacional en la manifestación que el próximo 10 de marzo se celebrará en Barcelona.

Por su parte, la organización ecologista Greenpeace pidió ayer en un comunicado al PP que haga «una lectura objetiva de la enmienda aprobada el jueves por abrumadora mayoría en el Parlamento Europeo y que reforme el Plan Hidrológico Nacional (PHN)».

«El Parlamento Europeo se manifestó claramente en contra de los sistemas de gestión no sostenibles del agua, y en contra de la financiación comunitaria de los trasvases –añade–. Estos son los hechos y lo demás son lecturas partidistas que no cambian la realidad».

En este sentido, asegura que el PHN «es el mejor ejemplo en Europa de una política de aguas no sostenible», ya que su eje principal es conseguir aumentar la oferta de agua disponible en cuencas deficitarias a través del trasvase del Ebro.

Por otro lado, asegura que las infraestructuras del trasvase «afectarán gravemente a la red de espacios protegidos de la Unión Europea (Red Natura 2000)», y que su construcción supondría el incumplimiento de al menos tres directivas comunitarias. «No se puede hablar de desarrollo sostenible y promover al mismo tiempo este Plan Hidrológico», criticó.

Además, denuncia que el Ministerio de Medio Ambiente se está «escondiendo» detrás de la «crisis política» que ha generado el debate en el Parlamento Europeo y que trata de presentar como una ratificación de su política de aguas «un debate que culminó condenando los trasvases de aguas, eje principal del PHN».

«Es falso que el Parlamento Europeo ratificara el PHN, comenta. No lo condenó debido a las inmensas presiones ejercidas por el Gobierno español y el PP, pero quedó en evidencia el generalizado descontento que hay en Europa con la política pantanera del Gobierno».