La Diputación, a través del Consorcio Provincial de Medio Ambiente, ha puesto en marcha la segunda fase de la campaña de sensibilización sobre la recogida selectiva de pilas usadas.

Esta campaña de información y sensibilización ciudadana comenzó el año pasado con el objetivo principal de informar y concienciar sobre los beneficios de la reducción del consumo de pilas usadas, fundamentalmente entre los más pequeños. Se trata de concienciar a los niños de que existen otras alternativas antes que el consumo de pilas, como la energía solar. Además, también se ha pretendido concienciar a la población de la importancia de la recuperación de las pilas y dar a conocer cuál es el sistema de recogida de pilas y que proceso siguen desde que se recogen.

En esta campaña de 2001 se editaron 1.500 carteles, 30.000 folletos, 50.000 adhesivos y 75.000 unidades didácticas, que llegó a los centros escolares, ayuntamientos, centros socioculturales y centros de mayores.

En concreto, a lo largo del año pasado esta campaña llegó a 68.000 alumnos de un total de 118 centros de Educación Infantil, Primaria y primer ciclo de la ESO, así como 36 centros de Educación Secundaria.

Como resultado de esta campaña se han implantado 600 contenedores de pilas en todos esos centros, recogiendo 35.000 kilos de pilas salinas, 194 de pilas botón (las más peligrosas por la gran cantidad de mercurio que tienen), y 464 kilos de pilas recargables y baterías de móviles. Para ello ha sido necesaria una inversión de 58.500 euros por parte de la Diputación.

La segunda fase, que ahora comienza, se destinará casi exclusivamente a concienciar a la población sobre la importancia de reducir el consumo de pilas. Esta campaña,que será financiada al cincuenta por ciento entre la Diputación y los ayuntamientos, supondrá un desembolso para cada ciudadano de 13 pesetas por año.

Por otro lado, la Diputación ha elaborado una campaña de sensibilización de la recogida selectiva en general que contará con un presupuesto de 60.000 euros, que será desarrollada por la empresa Proam durante un año.

Esta campaña se plantea con el objetivo de favorecer la reducción de los residuos, fomentar la recogida selectiva, concienciar a la población de que separe los residuos en origen y dar a conocer el sistema de recogida.

En este sentido, el diputado de Medio Ambiente, Ramón Sotos, explicó que los municipios de la zona norte de la provincia ha comenzado la instalación de las áreas de aportación, que contará con tres contenedores, uno para papel y cartón, otro para vidrio y un tercero para envases.

Según explicó el diputado de Medio Ambiente, el objetivo es comenzar con el reciclaje de estos residuos seis meses antes de lo previsto, ya que se llevarán a la Estación de Transferencia de Peñas de San Pedro y de ahí a la planta de tratamiento de Hellín, «con lo que sólo quedaría pendiente el reciclaje de la materia orgánica».

El desarrollo de esta campaña global de educación medioambiental contará con 5.000 carteles, 175.000 folletos explicativos, 100.000 pegatinas y 7.000 unidades didácticas. En total se han previsto 336 actividades a desarrollar entre centros educativos, centros socioculturales, centros de mayores y ayuntamientos.