La Concejalía de Medio Ambiente incoará expediente sancionador a dos empresas de limpieza de la ciudad, por realizar vertidos ilegales y, por tanto, vulnerar la ordenanza municipal de medio Ambiente.

Según estudió ayer la comisión informativa de Medio Ambiente y tal como recoge el informe-propuesta del negociado de Medio Ambiente Urbano, en el mes de enero de este año, el servicio de vigilantes-inspectores, desplazado hasta la zona del Canal de María Cristina próxima al Puente de la Alfonsica, observó un camión-cisterna de la empresa Limpiezas Fernández, realizando un vertido de aguas, presuntamente de origen fecal o residual, procedentes de la descarga de la cuba del vehículo citado, en un registro de la red de alcantarillado.

Los vigilantes-inspectores de Medio Ambiente se aproximaron al vehículo, momento en el que los trabajadores de la empresa retiraron de inmediato la conducción de descarga, «manifestando que ya habían terminado y que sólo se trataba de agua limpia», dice el informe de Medio Ambiente.

No obstante, los inspectores «pudieron constatar la existencia de una mancha de aguas negras en las inmediaciones de la tapa del registro de alcantarillado y detectaron un fuerte olor característico de aguas fecales procedentes del registro».

Según el informe de Medio Ambiente, la empresa Limpiezas Fernández no dispone de autorización alguna para efectuar el vertido detectado a la red de alcantarillado municipal, independientemente de las características del vertido, por lo que se considera «procedente» la incoación de expediente sancionador a dicha empresa.

Aguas residuales

En los mismos términos se expresa otro informe-propuesta de Medio Ambiente Urbano, pero con la empresa Limpiezas Peninsulares, quien efectuó un vertido de aguas residuales en el paraje Casa de la Carrasca, donde en febrero de este año existía un gran volumen de aguas negras, aunque al parecer los terrenos son propiedad del dueño de la empresa.

Sin embargo, dos días más tarde los inspectores comprobaron que la empresa estaba succionando agua de la zona de vertido y depositándola en un terreno agrícola cercano a la misma finca, lo que está considerado como «una infracción grave por ser vertido a cielo abierto».