Representantes del ayuntamiento, de la Federación de Asociaciones de Vecinos de Albacete (Fava), de grupos ecologistas, de consumidores, de sindicatos, de la Universidad de Castilla-La Mancha y de las Federaciones de Asociaciones de Madres y Padres (Fampa) constituyeron ayer la comisión de seguimiento del proyecto de remodelación del Parque de Abelardo Sánchez. Esta comisión se ha creado a propuesta del Consejo Local de Medio Ambiente, formado por 28 colectivos, instituciones y asociaciones.

En su primera reunión, celebrada ayer en la Casa Consistorial, se analizó el pliego de condiciones que sentará las bases para el concurso de adjudicación de tan polémico proyecto, y en el que se invertirán más de 579 millones de pesetas. Buena parte de este presupuesto será aportado por la Unión Europea.

La comisión apenas introdujo cambios en el pliego de condiciones, tan solo modificó la puntuación para la adjudicación, concediendo más puntos a la experiencia de obras similares en detrimento del menor precio con respecto al presupuesto de salida. La intención del equipo de gobierno es que las obras comiencen el 1 de octubre, para lo que antes de esa fecha, la comisión de Medio Ambiente, y después, la comisión de Gobierno, deberán haberlo aprobado; después, se publicará en el Boletín Oficial de la Provincia (BOP), se recibirán y analizarán las ofertas, y se adjudicarán los trabajos.

Quince meses

Desde su inicio, el proyecto tendrá que estar terminado antes de 15 meses, con lo que si todo va bien, el nuevo Parque estará concluido para diciembre de 2002. Las obras se iniciarán por el replanteo y preparación de terreno, aunque el primer trabajo de importancia será la poda y apeo de especies vegetales, es decir, la tala de los más de 400 árboles que según la Universidad de Castilla-La Mancha, se encuentran en mal estado o amenazan con irse abajo.

A continuación comenzará la construcción de las nuevas instalaciones –desde el rescatado lago de los patos a las nuevas fuentes–, para pasar después a la modificación de suelos, plantación de vegetación y siembras, para concluir con la implantación de los nuevos sistemas de riego y limpieza.

El concejal de Medio Ambiente, José Eduardo Martínez Valero, propuso ayer en la reunión de la comisión de seguimiento que antes de iniciar las obras –es decir, en los últimos días de septiembre–, los integrantes de este órgano de control, junto a técnicos municipales, los directores de la obra y a los autores del proyecto del Parque de Abelardo Sánchez, se revisen uno por uno los más de 400 árboles que se pretende talar con el fin de salvar, si fuera posible, alguno de ellos.

En este sentido, los árboles que vayan a ser talados serán señalizados de alguna forma para que los ciudadanos «sepan los motivos por los que queremos eliminar este arbolado». En la reunión celebrada ayer, y a pesar de que el proyecto «recoge las propuestas de los populares», dijo el concejal de Medio Ambiente, el viceportavoz municipal del PP, José Miguel González Moraga, votó en contra, posición que posiblemente mantendrá esta formación política en la comisión de Medio Ambiente del próximo lunes, y en la que el orden del día solamente incluye este punto.

Desde que la Universidad de Castilla-La Mancha presentara el proyecto, el consistorio ha introducido varios cambios, «la mayoría, a petición del Partido Popular, con la vista puesta en alcanzar el máximo consenso, lo que se consiguió en primer término, pero al final, se han descolgado ilógicamente».

Así, por ejemplo, se descartó la idea de construir un mini-zoo, pero se incorporó la instalación de una cancha de baloncesto, la remodelación de los aseos, arreglo de cubierta del templete de música y más hidrantes.