Medio Ambiente dejará en Albacete una inversión de 5.500 millones en el 2002  
   
El presupuesto de la Secretaría de Estado de Aguas irá destinado a obras de abastecimiento, depuración de aguas y recuperación de cauces  
(La Verdad de Albacete. 16 de Octubre de 2.001)

El Ministerio de Medio Ambiente ha consignado una partida inversora de 5.500 millones de pesetas para la provincia de Albacete –200 más que este ejercicio–, dentro de los Presupuestos Generales del Estado de 2002, dinero que será dedicado a obras de abastecimiento, saneamiento y depuración de aguas y recuperación de cauces. Dentro de esta inversión se encuentran los 1.882 millones de pesetas que se destinarán a la finalización de las obras de abastecimiento de la ciudad de Albacete con aguas superficiales del río Júcar, un proyecto que estará liquidado en marzo del próximo año, según confirmó ayer el secretario de Estado de Aguas y Costas, Pascual Fernández, en el transcurso de una visita que realizó a la construcción de las mismas.

El Ministerio de Medio Ambiente ha designado un presupuesto de 5.500 millones de pesetas para la provincia de Albacete dentro del capítulo de inversiones de los Presupuestos Generales del Estado de 2002, una cantidad que fue calificada como «muy importante» por el secretario de Estado de Aguas y Costas, Pascual Fernández, tras realizar una visita a las obras de abastecimiento a la ciudad de Albacete con aguas superficiales del Júcar.

Precisamente, Pascual Fernández resaltó que, dentro de estos 5.500 millones de pesetas previstos para el año 2002 por el Ministerio de Medio Ambiente en la provincia de Albacete, se encuentran los 1.882 millones que permitirá la finalización de la infraestructura que garantizará el abastecimiento de agua a la población albaceteña desde el acueducto Tajo-Segura. En este sentido, el secretario de Estado de Aguas aseguró que estas obras estarán liquidadas hacia el mes de marzo del próximo año, momento en el que se abrirá un periodo de seis meses de prueba para su puesta en funcionamiento. «Con total seguridad –agregó– los albaceteños podrán consumir aguas del Júcar en el verano del año 2002, dentro de ese mismo periodo de pruebas». Pascual Fernández subrayó que esta infraestructura asegurará el abastecimiento de un agua «con una calidad magnífica» a una población estimada de 250.000 habitantes, y además permitirá, junto al paquete de medidas contemplado en el Plan Hidrológico de la Cuenca del Júcar, que el acuífero de la Mancha Oriental cambie de dirección y se recupere para beneficio tanto medioambiental como de uso agrario.

Las obras de abastecimiento de la ciudad de Albacete tiene un presupuesto de 4.770 millones de pesetas, financiados en un 85% por la Administración General del Estado y en un 15% por el Ayuntamiento de Albacete. La construcción está corriendo a cargo de la Sociedad Estatal Aguas del Júcar SA y, según Pascual Fernández, el ritmo de construcción está cumpliendo el calendario previsto, por lo que las obras estarán culminadas en el próximo mes de marzo de 2002.

En la actualidad, la conducción desde el acueducto Tajo-Segura está prácticamente terminada y lo que en estos momentos está en periodo de construcción es una gran balsa de agua no tratada, construida en el término municipal de El Salobral, con casi un hectómetro de capacidad, conferida para llenarse, a través de una conducción especial, en un espacio de 20 horas. Desde esta gran balsa surge otra conducción de aproximadamente 12 kilómetros de longitud que dirige el agua del Júcar hacia una planta de tratamiento potabilizador –que se está dotando de las tecnologías más avanzadas– que contectará con unos depósitos de almacenamiento de agua potable, con una capacidad de 50.000 metros cúbicos, que garantizarán el abastecimiento de la población.

Por otro lado, el resto del presupuesto inversor del Mimam irá destinado a la construcción de la presa del Salobre, a la potabilizadora de Letur, a las obras previstas en el entorno del vado de Tus, a la continuación del puente de la Vicaría sobre el embalse de Fuensanta y a la restauración hidrológica-forestal del río Júcar, entre otras.

Sobre la construcción del túnel Talave-Cenajo en la comarca de Hellín, Fernández afirmó que la única novedad es que el Gobierno de Castilla-La Mancha pidió la paralización de las obras, al objeto de realizar unos estudios específicos que determinen la necesidad de las mismas: «Hemos decidido tomarnos un plazo de unos meses, paralizar la obra, hasta que la Junta se convence de la necesidad de las mismas».

 
 
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