Mensaje tranquilizador sobre la calidad del agua que llegará a Albacete de la nueva obra de abastecimiento desde el Júcar a través del trasvase Tajo-Segura. Así lo aseguró ayer en rueda de prensa el nuevo presidente de la Confederación Hidrográfica del Júcar, José María González Ortea.

«Los albacetenses pueden estar bien tranquilos, porque las aguas que van a abastecer a Albacete serán de gran calidad, que se pueden servir en cualquier ciudad española y europea. Insisto en que los índices de calidad del agua que vendrá son extraordinariamente buenos», dijo José María González.

Comentó a continuación que tiene intención de mantener una reunión con el alcalde, Manuel Pérez Castell para informarle de la situación de la obra, ¨que estará finalizada en varias semanas» y de esa forma solucionar el malentendido que se ha generado respecto a la polémica sobre la calidad del agua del futuro abastecimiento de la ciudad de Albacete. González Ortea manifestó que el agua que llegará a Albacete cumple totalmente con la normativa europea, como exigió el Ayuntamiento en el último pleno extraordinario celebrado.

Al respecto afirmó que en la normativa de la Comunidad Europea se establecen una serie de limitaciones en varios aspectos, entre los que destacan el nivel de sulfatos que está en torno a los 250 miligramos por metro cúbico, manifestando que pueden estos parámetros pueden superarse siempre y cuando se den una serie de circunstancias, entre las que destacó las provocadas por el medio natural, que no se pueda ofrecer otro tipo de abastecimiento y que este aspecto sea comunicado a la Unión Europea, «hecho que se da con bastante frecuencia».

Mediciones

«En caso del agua que se suministra a Albacete previa a su paso por la potabilizadora, se ha dado en el año 1999 un índice de sulfatos ligeramente superior al recomendando por la directiva de la Unión Europea, aunque en los dos años posteriores no superó los 200 miligramos, hecho provocado a que el río Júcar transcurre por zonas yesíferas», dijo el presidente de la Confederación Hidrográfica del Júcar.

Por otro lado, el comisario de Aguas, Javier Ferrer manifestó que el agua que abastecerá a Albacete tras la obra que se está realizando superará en calidad a la que en la actualidad está llegando procedente de pozos subterráneos.

Aportó en este sentido un dato tras el análisis último realizado en 1999, en el que se detectó una media de sulfatos de 333 miligramos por metro cúbico, llegándose a alcanzar en algún pozo concreto los 900. No obstante, afirmó que según la bibliografía existente es a partir de los 600 miligramos cuando se podrían producir problemas gastrointestinales en el consumo. «El agua que llegará a Albacete será del grupo A1, que es la mejor para el consumo», manifestó el comisario de aguas, comentándose incluso que en numerosos municipios de la Comunidad Valenciana que se abastecen con agua del Júcar se superan los niveles recogidos en Albacete.

Se comentó por estos técnicos que la fórmula de tratamiento de las aguas por ósmosis inversa que se ha planteado no tienen antecedentes en la Confederación Hidrográfica del Júcar, circunstancia que de producirse llevaría la consecuencia inmediata de un aumento de los costes que repercutiría por los procedimientos que deben utilizarse en este caso en el recibo del agua.

«El alcalde de Albacete puede plantear la idea de tener la mejor agua del mundo, pero debe ser el Ayuntamiento quien decida tras valorar el coste y la financiación de la obra», dijo González Ortega.

El presidente de la Confederación Hidrográfica del Júcar, José María González Ortea adelantó que la obra de abastecimiento de agua desde el río Júcar a Albacete estará acababa en breves semanas.

«Es lo que puedo adelantar ahora sin que pueda concretar ninguna fecha. El problema que tendría Albacete de no aceptar esta obra, caso de que se produjese, derivaría en una situación de deterioro por la situación actual de los pozos», dijo el presidente de la CHJ.

Respecto al escrito enviado al Ayuntamiento reconoció que no fue afortunado en su contenido al haberlo realizado de una forma burocrática, por lo que dijo que su intención es dar las máximas explicaciones al alcalde, añadiendo que un escrito similar se ha enviado a 45 municipios abastecidos por el Júcar.

La Confederación no convence al alcalde

De momento, no hay acuerdo. El alcalde, Manuel Pérez Castell, y el presidente de la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ), José María González Ortea, mantuvieron ayer una primera reunión de trabajo sobre el futuro abastecimiento a la ciudad con agua del Júcar, pero de la misma no salió compromiso alguno sobre cómo superar la, aparentemente, excesiva concentración de sulfatos que presenta el líquido elemento. En otras palabras, de una planta de ósmosis inversa -opción que maneja el Ayuntamiento-, nada de nada.

La reunión se celebró en el Ayuntamiento, y a la misma, además, asistieron el comisario de Aguas de la CHJ, Javier Ferrer, y el consejero delegado de Aguas del Júcar -empresa pública que ha construido la nueva infraestructura del abastecimiento a la capital, con una inversión de más de 24 millones de euros (4.000 millones de pesetas)-, Lorenzo Castilla.

Pérez Castell calificó de «muy importante» este primer encuentro con Ortea tras su reciente toma de posesión como máximo responsable de la Confederación. En la reunión -en la que Pérez Castell entregó unas navajas a sus visitantes- el primer edil trasladó a los responsables de la CHJ la «necesidad» que «este alcalde ya dijo, que comparten los ciudadanos de Albacete y que el pleno ratificó», y que no es otra que el agua que va a suministrar el Júcar al municipio «cumpla todos los parámetros sin excepción de la Unión Europea», según aseguró en rueda de prensa.

Derecho consolidado

«Albacete tiene derecho a agua del Júcar, como así lo ha reconocido el Gobierno después de una importante manifestación regional en nuestra ciudad, y tenemos derecho a que sea de la máxima calidad, por lo que no nos valen excepciones, y técnicas hay», añadió el alcalde, tras lo que solicitó a González Ortea que «lo antes posible» el Ministerio de Medio Ambiente (Mimam) y el resto de organismos competentes comuniquen qué medidas se van a adoptar para que el agua «sea de la máxima calidad».

Cabe recordar que la pasada semana, el pleno acordó no firmar la recepción de las obras de la traída de aguas hasta que se dé una alternativa técnica para corregir el problema de los sulfatos -se concedió un mes como plazo-, a la vez que se decidió no pedir a la Unión Europea la excepcionalidad para que los albaceteños puedan consumir el agua del Júcar.

«El agua de Albacete no puede venir por la excepción, sino por la garantía de calidad», apuntó el alcalde, para quien «no es correcto lo que dice la Confederación sobre que la ley contempla pedir una excepción, garantizo que el agua va a venir al grifo de los albaceteños sin excepción alguna».

Sulfatos

Posteriormente compareció sin salir del Ayuntamiento el presidente de la CHJ, quien explicó que «le hemos dicho al alcalde que el agua del Júcar no tiene ningún problema», por lo que calificó de «artificial» la polémica suscitada. González Ortea dijo que el índice de sulfatos recomendado por la Unión Europea, 250 miligramos por litro, se superó hace tres años, sin que después se haya rebasado. Por ello, insistió, «el agua cumple con la calidad que marca la normativa europea».

En este sentido, el presidente de la Confederación aclaró que la normativa europea no se cumpliría si el agua del Júcar no fuera admitida por la Unión Europea. «La normativa europea señala que si se supera este parámetro -el de los sulfatos-, se debe justificar explicando primero que es por causas naturales y que no hay alternativa, pero es que con el nuevo abastecimiento en marcha, sí existe una alternativa a los pozos de Albacete, que desde luego, no cumplirían la normativa». No obstante, González Ortea afirmó sentirse «optimista» de cara a la búsqueda de una vía de solución a esta situación y explicó que, además de contestar por escrito al Ayuntamiento de Albacete lo antes posible explicando claramente la situación del abastecimiento respecto a la normativa europea, la Confederación Hidrográfica del Júcar realizará un estudio más detallado y continuo del caudal del Júcar con el fin de clarificar al máximo la situación del caudal del que beberá la ciudad.

Por último, el presidente de la CHJ aseveró que lo importante es la calidad del agua que se ofrecerá a los albaceteños y reiteró sus garantías de que será la máxima. «Y es que de los análisis existentes, sólo en un caso se superaron los 250 miligramos de sulfatos por litro», agregó. Habrá que esperar unos días más.