POR EL LLANO Y POR EL MONTE LA GUERRILLA VA….

El llano.-

Por el llano se ven las verdes gavillas que anuncian que se va acercando la primavera. Con el tiempo las gavillas maduran, se vuelven doradas, crecen y dan fruto. De este fruto comerán nuevas generaciones que aprendieron cómo crecen las gavillas, como se cuidan, como se siegan y recolectan, como se llevan, poco a poco, despaciosamente, con cuidado, con cariño, por el campesino con la hoz al cinto y el burro en la mano, tirando del carro con dos ruedas que transporta, bien cargado, para ahorrar viajes, las gavillas cargadas de espigas y frutos que formarán el dorado pan. Llegan a la era, esperan los mulos con los trillos y padecen su pisoteo, pausado, circular, doloroso, que separa los frutos de las espigas, luego se avientan. El viento del verano lleva las pajas y cae verticalmente el fruto. Se amontona y se recoge, y con tiempo y cariño, se lleva al molino, que con el trabajo delicado se machaca y se va convirtiendo en harina, la harina con agua, en masa, la masa con calor, ya en el horno, en pan….

Si prescindimos de aquella gavilla verde, ¿dónde iremos a por el pan?. Si prescindimos del trabajo y el sudor de los que se agolpan ante las gavillas, ¿qué tomaremos en vez de pan?. Alrededor de esos frutos dorados que dan harina, las pajas que intentaron llegar también fueron aventadas y lo que el viento se lleva, ese viento sur, de federico, que lleva colmillos, girasoles, alfabetos y una pila de Volta con avispas ahogadas, ya no vuelve más…

Sólo con el trabajo sobre las gavillas, sale el fruto. Y la gavilla verde ha madurado y crece tanto, con el trabajo del jornalero, el mulero, el molinero y el panadero, que se dá como mejor se podía dar, como alimento para todos, los que se lo merecen porque están hambrientos, y hasta para los que escupen el pan…

El monte.-

En el monte el protagonista es el guerrillero. El maquisard. Quién se acerca a él con malas artes es el traidor. Es la contrapartida. El guerrillero, como aquella gavilla del llano, ha nacido para morir por la libertad, pero su caída no es en vano. Porque su ejemplo, su heroismo, está fuera de todas las dudas. En el monte no hay diferencias, hay hombres y fusiles, hay república contra fascismo. Así de duro y así de claro. Y el que no lo quiere es un traidor. Y el que se ampara tras el guerrillero pero no es guerrillero es la contrapartida, es el huído, es el que traiciona. No hay terminos medios. Así es el monte. Ya sabemos que el cervato y la cabra tiran al monte. Pero allí no son nadie. Allí el amo es el guerrillero antifranquista y todo lo que se mueva que no es guerrilla, vá contra la guerrilla.

El guerrillero tiene una gran corazón. El guerrillero acoge a todo antifranquista, pero vivir en el monte es duro y se necesitan algo mejor que palabras, que manejos, que oportunismo. El guerrillero no firma papeles. No hemos visto papeles firmados. Hay quién los nombra, hay quienes los utilizan, pero el guerrillero no teme nada, sólo la traición y la contrapartida. Esa es la ley del monte.

En ese monte cabe todo el mundo que quiera luchar contra el franquismo. Y el que lucha contra el compañero y no contra el franquismo, es la contrapartida, es el franquista disfrazado. Aunque se llamen socialistas y hayan olvidado a Pablo Iglesias, aunque se llamen trostkystas y escondan el piolet en la mano, aunque se llamen comunistas y lleven el libro de Stalin en el bolsillo, aunque se llame anarquistas y disparen contra Durruti, se les desenmascara y se les denuncia.

No nos equivoquemos, el monte es del Guerrillero Antifranquista, es su honor y es su gloria. Y los demás humildemente y pidiendo un puesto, tendremos que colocarnos, detrás, muy detrás de los héroes, que son los que murieron por nosotros, y lo son también los que quedan para dar testimonios de los que murieron. El resto son componendas, subterfugios y miserias.

El Homenaje lo dán ellos con su ejemplo, su valor, su heroísmo. Quienes creamos que el Homenaje al Guerrillero lo damos los que no pisamos el monte, estamos aviados, somos el oportunismo de la izquierda que tiene que acabar de una vez…

Y no digo más. Pedreño lo dijo con otras palabras, Dimas con otras, pero es lo mismo. No caben interpretaciones, ni malentendidos. El trabajo de la Gavilla es ejemplar, con sus fallos, con sus aciertos, con sus debates, con sus Jornadas. El Homenaje al Guerrillero Antifranquista es ejemplar, con su reunión en el monte, con su participación y su solidaridad. Y el que venga a Santa Cruz de Moya a hacerse la foto, que se la haga, yo no voy a votar para echarle, pero la mentira se desenmascara sola. La solidaridad es el ejemplo que dá la izquierda al mundo. ¡No seas de derechas, mujer, hombre!

Antonio Cruz González
DESPAGE. Desaparecidos de la guerra civil y el exilio republicano.

Agosto de 2005.

Para Santa Cruz de Moya. Jornadas y Homenaje al Guerrillero Antifranquista del año 2005.