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Mariana, eres mujer.

Serie dedicada a nuestras mujeres de la República.

M_T_Leon copiar.jpg (24599 bytes) María Teresa León

Logroño, 31 Octubre 1903 - Madrid, 13 diciembre de 1988

por Mariana Violet, para Despage

Dedicado a Rosa Regás, autora, editora, directora de la Biblioteca Nacional, a quién, gracias a sus indicaciones debemos el haber comenzado esta serie dedicada a las mujeres de la República.

 

Foto: Portada del libro Memoria de la Hermosura. Ed. Fundación Autor, Iberautor Promociones Culturales, 2005. Coordinadora Olga Álvarez de Armas.

En el año 1987 se publicó la primera edición en España de Juego Limpio. Antes no había circulado libremente, pese a haberse editado en Argentina en el año 1959. En esta novela-relato biográfico se recogían experiencias personales y detalles de los momentos vividos en Madrid en la Guerra Civil, aparecían personajes reales, compañeros de la autora, el primero Alberti, y también Neruda, Miguel Hernández, León Felipe. A su lado para ayudar a la narración, héroes de ficción, que hacían el relato más entretenido y que sin duda, estaban sacados de la realidad.

Con esta obra conocí literariamente por primera vez a María Teresa. Es el problema de la dictadura y de la amnesia posterior. El silencio, el tremendo silencio sobre nuestros más preciosos y más preciados (deberían serlo si los hubiesémos conocido), mujeres y hombres de nuestras Artes y nuestras Letras. Fusilados unos como García Lorca, muertos otros, por las secuelas de la guerra, como Miguel Hernández y D. Antonio Machado, exilados, en fin, desde Juan Ramón Jiménez hasta Garfias, desde María Zambrano a Concha Méndez, desde León Felipe hasta Altolaguirre o Cernuda. Una generación como no la hubo desde el siglo de Oro, y destacando, no más, pero tampoco menos, Rafael Alberti y María Teresa León. A veces se les ha achacado a María Teresa como a Zenobia Camprubí, vivir para que destacara su pareja. Eso unido al ya machismo habitual, ha hecho que grandes mujeres, tan grandes como los hombres con los que vivieron, hayan quedado en el segundo plano.


Y así, nos cuenta Almudena Grandes, que ese ruedo de ambiente machista, se burlaba de la belleza de María Teresa y de sus vestidos, pero se daba el caso que los mismos personajillos, ya que el círculo se cerraba en torno a ellas, también se burlaba de Concha Méndez por su supuesta fealdad. Es decir este análisis basado en los prejuicios y en la falta de decencia y educación, viniera de quién viniera, dejaba traslucir ironía y ataque a la condición femenina, para no tener que fijarse en sus valores.

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María Teresa León (primera a la derecha) en el homenaje a Cernuda, por su obra La realidad y el deseo. De Pie de izda. a dcha., Vicente Aleixandre, García Lorca, Pedro Salinas, Rafael Alberti, Pablo Neruda, José Bergamín, Manuel Altolaguirre y María Teresa. En el centro Concha Méndez y al lado, Luis Cernuda. Madrid, 19 de abril de 1936.


 Sinceramente, ¿Podemos citar cinco mujeres, desde el siglo de Oro a nuestros días, que hayan destacado en la Literatura española, con tan gran volumen de obra, tocando todos los géneros, incluso en su dramatización y su profesionalidad en todos los campos?. Desde luego que se pueden citar. Pero María Teresa León estaría entre ellas.


 Y es que María Teresa León, ni por méritos, ni por profesionalidad, ni por militancia,  merece ser tan poco conocida en su país. Escritora, guionista de cine, actriz, directora, autora, ensayista, dibujante, poeta…Tocó todo lo relacionado con los medios en los que anduvo, literatura, artes plásticas, cine, teatro. Y todo lo hizo bien. El desgraciado exilio franquista y su muro de silencio sobre todo lo que fuera republicano y comunista, hizo que esta autora fuera desconocida en España. Su fidelidad a Alberti, así como su apoyo continuado, se resolvió más a favor de él, que de ella. Intentamos hacer aquí un poco de justicia y que salga a la luz, lo que la Historia, hasta ahora, le ha negado.


 Pero en ningún caso dejaremos de decir, que ser la compañera de Alberti, era estar al resguardo del poeta gaditano. La prueba es que ella antes de conocerle ya escribía y publicaba. Y cuando le conoció y decidió pasar su vida junto a Rafael, comentó: “Ya no estoy sola, ya no me contesta el eco cuando hablo en voz alta. Empiezo, empiezo por mi cuenta y riesgo la vida”. Es evidente que estas palabras no reflejan dependencia profesional sino libertad y autonomía plena. Y la conjunción de ideas y de escrituras no desmerece la obra final, porque sin ser mal pensados, podríamos emitir el juicio hacia el otro lado del espejo, que Rafael, como cualquier pareja, también creció con la unión de una gran escritora.


 Logroñesa, hija de militar, emparentada con los Menéndez-Pidal, prima de Jimena, su extracción familiar de raíces burguesas no la impide interesarse, desde su gran capacidad literaria, en participar desde muy temprano a través de colaboraciones en diarios, por medio de cuentos y novelas en los grandes eventos literarios. Casada muy joven, enseguida se ve con dos hijos, que no la impiden contra viento y marea, seguir con su vocación literaria. Con 27 años conoce a Rafael Alberti, el gran amor de su vida, con el que pasará todo el exilio hasta su vuelta a España en 1978.


 Con gran pasión vive la República y la Guerra Civil, sus dotes participativas en todo lo que fuera antifascista, la llevan a crear Nueva Escena, que era dentro de la Alianza de Intelectuales Antifascistas la sección que se encargaba del teatro, ocupó varios cargos en el Consejo Central del Teatro, en el Teatro de Arte y Propaganda del teatro de la Zarzuela en Madrid y dirigió las llamadas Guerrillas del Teatro (en Acción contra el Fascismo, por la victoria del pueblo, por la cultura). Obras como “Los títeres de cahiporra” de García Lorca, “El cerco de Numancia” de Cervantes, con adaptación de Alberti, fueron obras dirigidas por ella. En la Alianza de Intelectuales también participa como directora y actriz en “Amor de don Perlimpín con Belisa en su jardín” de García Lorca.


 Su vida está llena de viajes, casi todos ellos forzados por las circunstancias, unos por militancia y otros por el exilio. Así conoce la Unión Soviética, Francia, Argentina, Chile, Roma. En el 1955, hizo un periplo con Rafael por Polonia, URSS, Rumanía, Checoslovaquia y Alemania Oriental, para más adelante, en 1957 visitar China. En años sucesivos visitan varias naciones americanas, Venezuela, Colombia, Perú y Cuba.
 Participa en Buenos Aires, en 1944, en el guión cinematográfico, junto con Alberti, de “La dama duende”, obra de Calderón de la Barca, que obtuvo varios premios. También escribió el guión de la película “El gran amor de Gustavo Adolfo Bécquer” (1945).

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Su novela Juego Limpio, escrita y publicada en Buenos Aires en 1959, no fué conocida por los españoles del exilio interior hasta febrero de 1987, en edición de Seix Barral.


 Esto no le impide que vaya escribiendo y publicando. Citaremos como más famosa su biografía: “Don Rodrigo Díaz de Vivar, el Cid Campeador”, que se adapta fielmente a los datos históricos que rodearon al personaje, publicada en 1954, y reeditada en muchas ocasiones, así como traducida a otras idiomas. En 1960 se editó “Doña Jimena Díaz de Vívar, gran señora de todos los deberes”. Pareja a la biografía anterior, pero con su personaje más completado, mejor trazado. En este año también edita un volumen sobre “Cervantes, el soldado que nos enseñó a hablar”, y que no se editará en España hasta su retorno en 1978.
 

La vida de María Teresa León entre la militancia antifascista y la profesión de escritora, no ha pasado desapercibida a numerosos tratadistas. Desgraciadamente, no ha descendido a la calle. Su deterioro físico al volver a España, no la permitió, al contrario que a Rafael Alberti, aparecer en público y partipar políticamente, como hubiera deseado. En 1988 muere, el 13 de diciembre, tras un proceso de Alzheimer, y fue enterrada en el cementerio de Majadahonda, precisamente el día que había una huelga general que paralizó el país. Curioso homenaje de las circunstancias a la luchadora que siempre fue.
 

Rafael puso este epitafio en su lápida: “Esta mañana amor tenemos veinte años”.
 
Bibliografía empleada:

  • María Teresa León. Memoria de la hermosura. Coordinación de Olga Alvarez de Armas. Madrid 2005.
  • Juego Limpio. María Teresa León. Seix Barral 1987.
  • La Arboleda Perdida. Rafael Alberti. Seix Barral. Barna 1975. 1ª Ed. Buenos Aires 1959.
     
    Principales Obras de María Teresa León:
     
  • Cuentos para soñar. 1928. Burgos.
  • La bella del mal amor. Cuentos. Burgos. 1930
  • Revista Octubre. Fundada por ella y Rafael Alberti. 1933. En ella se publican varias obras de teatro, entre otras, “Huelga en el puerto” de María Teresa León.
  • Rosa-fría, patinadora de la luna. Madrid. 1934. Cuentos.
  • Cuentos de la España Actual. 1935.
  • Revista Mono Azul. Fundada por ella y Bergamín, Dieste, Varela, Alberti, entre otros. 1936.
  • La aventura de la risa y el llanto en el teatro español. Conjunto de conferencias dadas en Chile en 1940.
  • Contra viento y marea. Novela. 1941. Buenos Aires.
  • Morirás lejos. Buenos Aires. 1942.
  • La historia tiene la palabra. 1944
  • El gran amor de Gustavo Adolfo Bécquer (guión cinematográfico, y posterior biografía). 1945.
  • Las peregrinaciones de Teresa. Argentina. 1950.
  • Don Rodrigo Díaz de Vivar, el Cid Campeador. 1958.
  • Sonríe China, con poemas y dibujos de Alberti. B. Aires. 1958.
  • Nuestro hogar de cada día. Manual para la perfecta ama de casa. B.Aires. 1958.
  • Juego Limpio. Buenos Aires. 1959.
  • Doña Jimena Díaz de Vivar, gran señora de todos los deberes. 1960.
  • Fábulas del tiempo amargo. México. 1962.
  • Menesteos, marinero de abril. México. 1965.
  • Cervantes. Buenos Aires. 1969.
  • Memoria de la melancolía. Buenos Aires. 1970.
     
    Participación en obras de teatro y cine.
     
    En teatro:
     
    Dirige y adapta: Los títeres de cachiporra de García Lorca, La cacatúa verde de A. Schinitsler. Dirige la adaptación de Alberti de El cerco de Numancia de Cervantes y el Amor de don Perlimplín con Belisa en su jardín, también de G. Lorca. Todo en 1937.
     
    En cine:
     
  • Adapta para el cine Los ojos más lindos del mundo, en Buenos Aires, 1943.
  • Escribe junto a Rafael Alberti, la adaptación al guión de la obra La dama duende de Calderón de la Barca. La película se estrenó en 1944, con premios a la dirección, guión, actuación, escenografía, banda sonora entre otros. Gran difusión en Sudámerica.
  • Escribe el guión de cine de El gran amor de Gustavo Adolfo Bécquer, que luego publicaría en biografía. 1945.
  • Cortometraje Pupila al viento. Con locuciones de Rafel Alberti y María Teresa León.
  • Trabajos en televisión argentina en un programa de Jacobo Muchnik: Buenas noches, mucho gusto.