Derechos para Tod@s 
Número 15
junio - julio - agosto 2003



CARTA DESDE LA PRISIÓN

 

José Bové

Hola a todas y a todos,

Primero que nada quiero tranquilizaros: estoy bien. La moral es buena y la cárcel no está preparada para debilitar mi determinación y mi combatividad.

Aquellos que pensaban que mi encarcelación, después de una detención propia de los países más totalitarios, me iba a sumergir en la tristeza ¡ van listos !. No es así. Es un signo de debilidad por su parte y una tentativa de imponer, por la fuerza, aquello que todos nosotros rechazamos.

El debate sobre los OGM ha vuelto al primer plano. El levantamiento de la moratoria no podrá hacerse a escondidas. Los Estados deberán asumir sus responsabilidades. Estamos enfrentados a una elección de la sociedad. La lógica mercantilista del mundo frente al respeto de los derechos fundamentales, aquí está el desafío. Y el futuro de los campesinos y de la agricultura está en el centro de esta alternativa fundamental.

Desde el 22 de junio, no pasa un solo día sin que tenga noticias de lo que sucede fuera. Recibo testimonios cotidianos a través de vuestras cartas, de la movilización que se está desarrollando en todo el territorio e incluso en el extranjero. Aquí, detrás de los barrotes, leer, escuchar la radio o ver en la televisión como reaccionáis y como inventáis la solidaridad me da fuerzas considerables.

Me gustaría agradeceros particularmente todos los esfuerzos que habéis realizado para exigir al Presidente Jacques Chirac mi liberación tras el 14 de julio. Según lo que he leído, habéis sido más de 800.000 los que lo habéis acosado para que tome una posición política coherente con sus discursos internacionales. No ha pasado nada! La máscaras han caído. Ya nadie se hace ilusiones, al menos la cosas están claras ahora. Solo las relaciones de fuerza permitirán conquistar y poseer nuevos derechos. El impulso de la solidaridad ha demostrado, también más que nunca, que el combate de la Confederación Campesina no estaba asilado y que se integraba en el conjunto de los movimientos sociales de resistencia al modelo neoliberal.

Estoy impactado por la diversidad de cartas que recibo de distintos orígenes sociales, sindicales o políticos que apoyan nuestro combate. Es una prueba concreta de lo que afirmamos desde hace años. La Confederación Campesina, por su práctica, sale de corporativismos arcaicos y contribuye a llevar el debate para la construcción de un verdadero movimiento social de luchas. OGM, soberanía alimentaria, represión antisindical y antisocial, derechos fundamentales, servicios públicos y cultura se reúnen para denunciar la mercantilización acelerada del planeta. Es por lo que, más que nunca, la cita del 8, 9 y 10 de agosto en Larzac (Francia) es fundamental. Será el punto de partida de la movilización contra las políticas de la OMC, y además, para la creación de convergencias con el fin de enfrentar los aspectos antisociales del gobierno Raffarin en septiembre. Mi participación a vuestro lado durante estos días, como sabéis, estará fuertemente dificultada. No obstante estaré con vosotros con mi pensamiento. Os apoyaré a mi manera.

El combate continúa . Globalicemos las luchas para globalizar la esperanza!!

José Bové

21 julio 2003.

Traducción: Sergio Escribano - Cerai