Derechos para Tod@s 
Número 11 
noviembre - diciembre 2002




Elecciones ecuatorianas
RECAMBIO EN EL ECUADOR

Isaac Bigio, catedrático de la London School of Economics and Political Sciences


La elección de Lucio Gutiérrez como presidente ecuatoriano es parte de un sustancial giro en la correlación de fuerzas sudamericana. En 4 meses los 4 países amazónicos que rodean al Perú han tenido presidenciales en las cuales la oposición ganó.

Las segundas rondas en Brasil y Ecuador triunfaron quienes plantean un cambio social. En Colombia ganó la derecha dura que pide una solución militar al conflicto interno. En Bolivia un magnate volvió a palacio mientras que en Ecuador, Noboa, otro millonario tan ligado a EEUU, fue derrotado por un ex-coronel golpista.

Las diferencias programáticas entre los 2 candidatos ecuatorianos no han sido mayores. Ambos aceptan que su país siga siendo el único de la región que ha renunciado a su moneda nacional, que se mantengan buenas relaciones con el FMI y que se permitan administradores privados en empresas públicas. Gustavo Noboa, uno de los empresarios más ricos del continente, acusó a su contrincante de ser comunista, pero Gutiérrez niega incluso ser de izquierdas.

Tanto en Quito como en Caracas habrá dos mandatarios constitucionales que se levantaron en armas contra previos gobiernos constitucionales. Chávez y Gutiérrez buscan transformarse en los caudillos militares de sectores pobres o racialmente discriminados. Ambos continúan la tendencia populista castrense del peruano Velasco pero con la diferencia que deben mantenerse dentro del cuadro de la democracia representativa y dentro de un mundo que ya no es bipolar y que no permite muchas opciones a quien quiera confrontarse directamente con Washington.

Gutiérrez aparece apoyado por los poderosos movimientos indígenas y por maoístas. Si bien plantea que Ecuador vuelva a la OPEP junto a Venezuela, Irak y otros países árabes, él acepta la dolarización y el ALCA.

Para Álvaro Uribe se presenta el problema de que los 3 grandes vecinos de Colombia pueden estar inclinados a plantear una solución negociada con la guerrilla.

Para la región el nuevo mandatario de Quito no ofrecerá mucha estabilidad. Carece de un partido estructurado y de una mayoría parlamentaria en un país donde constantemente el poder legislativo socava al ejecutivo. Dos recientes presidentes mayoritariamente electos fueron obligados a acortar su periodo por presión popular.