Iraq


*Hans von Sponeck fue coordinador humanitario de NNUU en Iraq desde 1998 hasta el año 2000

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Iraq


La resolución 1409 de NNUU sobre Iraq

Mucho ruido y pocas nueces

Hans Von Sponeck*

Publicado en EWR, 31 de mayo de 2002
Traducción : CSCAweb (www.nodo50.org/csca), 11 de junio de 2002

"La resolución comenzará a funcionar el 1 de junio de 2002. Pero no cambiará nada. No se permitirán inversiones extranjeras que puedan rehabilitar la infraestructura destrozada. Tampoco será posible utilizar los ingresos obtenidos del petróleo dentro de Iraq, impidiéndose así el despegue de la economía iraquí. El Banco Central iraquí carecerá de autoridad para controlar los recursos del país. Todo esto significa que los pilares que sostienen al régimen de sanciones en Iraq siguen siendo los mismos. Únicamente cabe llegar a la siguiente conclusión: la catástrofe humanitaria en Iraq no tendrá fin"

En junio de 2001, el Consejo de Seguridad (CS) de Naciones Unidas (NNUU) puso fin al debate sobre la anunciada entrada en vigor del régimen de "sanciones inteligentes" para Iraq. Algunos de los observadores iraquíes más sagaces se preguntaban : "si las sanciones tenían que volverse inteligentes, ¿qué es lo que habían sido hasta entonces ? " Dentro del propio CS se veía con bastante incomodidad el intento británico (apoyado por EEUU) de introducir una serie de cambios que garantizarían la continuidad del estatus del pueblo iraquí como pieza de cambio entre los miembros de la comunidad internacional. Los gobiernos de los países limítrofes con Iraq rechazaron de plano el borrador de la resolución por ir en contra de sus intereses económicos, mientras que otros países vieron los cambios propuestos en el nuevo régimen de sanciones como impracticables y otros como un intento siniestro de estrangulamiento del país. En opinión de estos países, en caso de ser aprobadas y puestas en práctica, las "sanciones inteligentes " como las propuestas por Gran Bretaña evitarían que Iraq siga recibiendo los ingresos extras que tanto necesita procedentes del contrabando de petróleo.

Los gobiernos de Gran Bretaña y EEUU argumentaron que ese tipo de ingresos procedentes del petróleo era precisamente lo que Iraq no necesitaba, ya que Iraq seguiría derrochando el dinero en la construcción de palacios y la adquisición de productos de lujo. No se puede negar que, en ocasiones, así ha ocurrido. Sin embargo, la mayor parte de estos ingresos extras son absolutamente necesarios para el mantenimiento de la infrastructura civil, para pagar a los funcionarios del Estado y los maestros, y para el mantenimiento de hospitales, carreteras y puentes. Bajo al actual régimen de sanciones, Iraq no recibe siquiera una mínima parte de los ingresos ganados por vía legal para pagar sus gastos de desarrollo nacional. Los protagonistas, no obstante, insisten : ¡nada de dinero en manos de Saddam Hussein !

'Sanciones inteligentes'

Las sanciones en su forma actual han obligado al gobierno iraquí a tomar medidas extra-legales para encontrar recursos adicionales que le permitan afrontar todos esos gastos. En su defensa de las "sanciones inteligentes", los gobiernos de Gran Bretaña y EEUU optaron de manera muy conveniente por olvidarse de mencionar este hecho. Las autoridades británicas y estadounidenses insistían en que las "sanciones inteligentes" tenían por objeto reducir el impacto negativo de las sanciones sobre la población civil y en su lugar fijar las iras de la comunidad internacional en los líderes iraquíes como principales responsables. Gracias al veto de Rusia, la propuesta de "sanciones inteligentes" terminó en la papelera. Los iraquíes se salvaron de otra embestida con lo poco que les ha quedado de su capacidad para sobrevivir.

Desde entonces, para el pueblo iraquí ha pasado un año más de castigo" como ya viene siendo habitual, si bien el tiempo no ha pasado sin que aquellos que pretenden recuperar lo que han perdido con el rechazo de su iniciativa de "sanciones inteligentes" sigan trabajando. La mayor parte de los esfuerzos dirigidos a provocar un cambio en la política iraquí durante los últimos doce meses parecen haber sido dirigidos por la combinación formada por el cerebro británico y la fuerza norteamericana. Las autoridades británicas, cansadas de que sus esfuerzos en favor de la inteligencia no condujeran a ninguna parte, dejaron su papel de líder a sus socios norteamericanos, toda vez que el borrador de una nueva resolución fue elaborado. Había llegado el momento de negociar los detalles del borrador con los demás miembros del CS de NNUU. Una derrota similar a la sufrida en junio de 2001 sería políticamente desastrosa, especialmente cuando tanto los gobiernos europeos como los de Oriente Medio se mostraban cautos, teniendo en cuenta que Iraq y el CS de NNUU habían llegado a una especie de punto muerto respecto a cómo poner fin al conflicto. Las sanciones habían contribuido exitosamente a destruir una sociedad, pero no habían conseguido colmar las expectativas británicas y estadounidenses para que Iraq se desarmase y se produjera un cambio de régimen político en Bagdad.

El 14 de mayo, los 15 miembros que componen el Consejo de Seguridad de NNUU aprobaron por unanimidad la resolución 1409 sobre la política de sanciones contra Iraq. Hasta el último minuto, Siria puso reparos a la resolución. Damasco consideraba que las propuestas equivalían a una concesión demasiado tardía y escasa. Menos conocido es el hecho de que el Reino Unido tuvo que esforzarse bastante para convencer a EEUU de que aprobase la propuesta británica. Una vez que el apoyo de EEUU estuvo garantizado, los norteamericanos se encargaron de vender el borrador de resolución a los rusos. Lo cual, por cierto, no ocurrió sin que durante varios meses las dos delegaciones regatearan sobre la cuestión de qué artículos podrían considerarse seguros para entrar en Iraq sin que fuera necesaria la supervisión de expertos británicos y norteamericanos en el Comité de Sanciones de NNUU [2], y qué artículos podrían ser declarados de uso militar o dual y por lo tanto verse sujetos al escrutinio del Comité de Sanciones. Las negociaciones entre EEUU y Rusia, que se prolongaron durante algún tiempo, prepararon el terreno para lo que el gobierno de EEUU ha denominado "un avance decisivo" para el pueblo iraquí. Buena prueba de este último punto es el informe de más de 300 páginas en el que aparecen identificados una larga lista de productos considerados de doble uso. La lista incluye productos que son necesarios para tratamiento médicos, el tratamiento de aguas, las comunicaciones, el transporte, la educación, la producción agrícola... en resumen: productos indispensables para vivir dignamente [3].

Los miembros no permanentes del Consejo de Seguridad de NNUU se han sentido en gran medida apartados a la hora de formular la resolución. "Ha sido cosa de cinco", se dijo, en referencia a los cinco miembros permanente del Consejo de Seguridad. Así es como algunos de los miembros no permanentes del Consejo de Seguridad piensan.

Una vez que el Consejo de Seguridad hubo aprobado la nueva resolución sobre Iraq, los medios de comunicación occidentales se apresuraron a aclamar la resolución, calificándola de gran paso adelante. Se pensaba que los productos de uso civil podrían entrar sin impedimentos en Iraq de ahora en adelante. Algunos llegaron a asegurar que la resolución representaba el fin del sufrimiento del pueblo iraquí, una afirmación que indirectamente venía a decir que el CS había contribuido a alimentar ese sufrimiento.

Sagazmente, el Departamento de Estado de EEUU añadió una advertencia : esta resolución solamente majoraría la vida de la población iraquí si el gobierno iraquí cooperaba plenamente. Lo cual recuerda a aquel junio de 2001, cuando los gobiernos de EEUU y Gran Bretaña argumentaban que de aprobarse su propuesta de "sanciones inteligentes" se demostraría que el auténtico villano responsable de las privaciones iraquíes vivía en Bagdad, y no en Washington o Londres.

Los contactos habidos entre los actuales miembros del Consejo de Seguridad revelan que tras el apoyo unánime hacia la resolución sobre Iraq hay un impresionante montón de dudas acerca de los beneficios que esta nueva política traerá al pueblo iraquí. Los procedimientos aprobados por el CS para la puesta en práctica de la nueva resolución muestran que las reservas en cuestión estaban plenamente justificadas. Todos los productos de uso civil que se consigan a través del programa "petróleo por alimentos" se verán sometidos al "análisis y registro" por parte de la Oficina de NNUU para el Programa de Iraq, así como a la evaluación" de la UNIMOVIC (Comisión de Control, Verificación e Inspección de NNUU) [4] y la Agencia de Energía Atómica Internacional. El Comité de Sanciones y la AEAI se han hecho cargo de los aspectos de seguridad. La responsabilidad que concernía a los contratos civiles se ha convertido en una cuestión multilateral, así que será ahí donde recaigan las culpas. Si algo se torciera, ya no serán EEUU ni Gran Bretaña los que aparentemente pueden ser acusados de estar " bloqueando " o " retrasando " las entregas, sino NNUU y la AEAI. Al mismo tiempo, los gobiernos de EEUU y Gran Bretaña se han asegurado de seguir manteniendo el control "desde lejos ". La cláusula 17 del procedimiento para la puesta en práctica de la resolución 1409 establece que "el secretariado [de NNUU] dará a petición de los miembros del Comité [de Sanciones de NNUU] copia de todas las solicitudes que hayan sido aprobadas (...)"

La resolución comenzará a funcionar el 1 de junio de 2002. Pero no cambiará nada. No se permitirán inversiones extranjeras que puedan rehabilitar la infraestructura destrozada. Tampoco será posible utilizar los ingresos obtenidos del petróleo dentro de Iraq, impidiendose así el despegue de la economía iraquí. El Banco Central iraquí carecerá de autoridad para controlar los recursos del país. Todo esto significa que los pilares que sostienen al régimen de sanciones en Iraq siguen siendo los mismos. Únicamente cabe llegar a la siguiente conclusión : la catástrofe humanitaria en Iraq no tendrá fin. Hay un refrán árabe que dice algo así como, " La montaña se puso de parto... ¡y dio a luz a un ratón !". La resolución 1409 es, ciertamente, un ratón pero un ratón de dientes afilados que seguirá haciendo daño al pueblo iraquí.


Notas CSCAweb :

1. El texto de la resolución puede consultarse en: www.un.org/News/Press/docs/2002/SC7395.doc.htm La valoración de esta resolución efectuada por el CSCA puede leerse en CSCAweb: EEUU y la nueva resolución 1409 sobre Iraq: mantener el embargo, engañar a la opinión internacional, ganar tiempo para la guerra
2. El Comité de Sanciones (o Comité 661) fue creado especialmente para Iraq con la misión de controlar la aplicación de las sanciones.
3. Puede consultarse en:
http://www.un.org/Depts/oip/cpmd/GRLunofficial.pdf.
4. La comisión de desarme UNIMOVIC sustituye a la antigua UNSCOM, que hubo de ser disuelta por sus actividades de espionaje en Iraq.



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