Index | Iraq 2004
Iniciativas y campañas
IRAQ


* El Consejo Nacional Árabe Estadounidense (NCAA, en sus siglas en inglés) es un consejo nacional panárabe fundado el 29 de noviembre de 2003 en Washington DC para dar respuesta a las necesidades de la comunidad árabe de EEUU.

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InternationalANSWER

Carta abierta de la comunidad árabe y musulmana de EEUU al Movimiento contra la Guerra en relación a la convocatoria del 20 de marzo - Nota preliminar del CSCA: mantener los lemas del 20 de marzo en solidaridad con Iraq y Palestina
Open letter from the Arab-American and Muslim Community to the US Anti-War Movement

Llamamiento de la coalición ANSWER y otras organizaciones estadounidenses en apoyo a la Jornada Internacional contra la ocupación del 20 de marzo
ANSWER / CSCAweb: 16-01-04

 20 de marzo de 2004: Convocatoria internacional contra la ocupación


"Esta es una época en la que la claridad política es un deber"

Declaración del Consejo Nacional de Árabes Estadounidenses*

CSCAweb (www.nodo50.org/csca), 20 de febrero de 2004
Consejo Nacional de Árabes Estadounidenses (EEUU), 24 de diciembre de 2004
Traducción para CSCAweb: Loles Oliván

"Estamos obligados a reconocer la naturaleza multifacética de esta guerra de expansión permanente. La fragmentación de las cuestiones por conveniencia política u organizativa a través de centrar la atención selectivamente en un solo aspecto de esta guerra es una equivocación y es peligroso. No solo debilita al emergente movimiento global por la libertad y la liberación sino que margina las voces de las muchas víctimas de la guerra"

El Consejo Nacional de Árabes Estadounidenses (CNAE) se suma al llamamiento de las movilizaciones populares contra la guerra y por el fin de la ocupación de Iraq a celebrarse el sábado, 20 de marzo de 2004. Coincidiendo solo 10 días antes con el aniversario de la fecha histórica del 30 de marzo de 1976, Día de la Tierra en Palestina, el llamamiento a la liberación, el derecho al retorno y la autodeterminación del pueblo palestino deben ser ese mismo sábado, 20 de marzo una imperativa necesidad política complementaria sin la cual el fin de las ocupaciones coloniales no podrá ser realizado en toda su extensión.

La manifestación del 20 de marzo conmemora únicamente el último ataque contra Iraq de hace un año. El CNAE reconoce que solo a través de un esfuerzo popular sistemático y organizado puede lograrse poner fin a la "Guerra permanente". Igualmente, es de primordial relevancia exponer pedagógicamente los objetivos estratégicos de EEUU. Corresponde a la capacidad del pueblo estadounidense formar un frente unido que, anclado en los principios de la libertad, la liberación y el respeto a la autodeterminación, se ha convertido inequívocamente en una prioridad.

Los árabes estadounidenses y el movimiento contra la guerra

Para la formulación de la organización y del marco político de este movimiento unitario, el papel de los árabes y musulmanes estadounidenses resulta central. Siendo el colectivo que en primer término está padeciendo los estragos de la guerra y el racismo en sus múltiples formas, nuestra comunidad debe de tomar medidas adicionales para afirmar su derecho constitucional a la libertad de expresión y de reunión, a pesar de todos los intentos y tácticas de intimidación dirigidas a abrogar tales derechos. No solo tenemos esa responsabilidad con nosotros mismos y con nuestros propios hijos, sino que la Historia nos ha situado ante la tarea de detener el avance de una nueva forma de McCarthismo y de miedo. Con ese fin y a pesar de los muchos inconvenientes que se nos imponen, llamamos a todas las comunidades de todos los sectores nacionales a que asuman nuestro justo papel en la creación de un futuro mejor para este país y para el mundo mediante las movilizaciones masivas contra la guerra y el racismo.

De hecho, el pueblo de EEUU sin excepción tiene un deber histórico y una responsabilidad colectiva para:

1. Acabar con el avance del estado de guerra de un Imperio emergente, particularmente contra el pueblo árabe, poniendo fin a la ocupación de Iraq y devolviendo las tropas a casa ya.

2. Acabar con toda forma de apoyo económico, político y militar al Estado de Israel y, en su lugar, apoyar los derechos de los palestinos a la liberación, autodeterminación y el derecho al retorno en toda su extensión.

3. Rechazar la USA Patriotic Act [1], acabar con la criminalización colectiva e institucional de los árabes y musulmanes estadounidenses, y garantizar los derechos constitucionales a todos ellos.

4. Reorientar las partidas presupuestarias hacia la reconstrucción y las necesidades internas en lugar de dirigirlas al militarismo y al expansionismo colonial.

Estamos obligados a reconocer la naturaleza multifacética de esta guerra de expansión permanente. La fragmentación de las cuestiones por conveniencia política u organizativa a través de centrar la atención selectivamente en un solo aspecto de esta guerra es una equivocación y es peligroso. No solo debilita al emergente movimiento global por la libertad y la liberación sino que margina las voces de las muchas víctimas de la guerra.

Ciertamente, los retos que tenemos ante nosotros son difíciles y monumentales, pero la Historia, en particular durante los dos últimos años, ha demostrado que somos capaces de enfrentarnos a ellos con garantías.

Como se vio en las fechas del 26 de octubre de 2002, del 18 de enero, del 15 y 16 de febrero, del 15 de marzo, del 12 de abril y, más recientemente, del 25 de octubre de 2003, somos un pueblo que ha tomado repetidamente las calles con cientos de miles de personas, millones de costa a costa que se han posicionado firmemente alrededor del mundo contra la guerra y a favor de la paz. Hemos rechazado el colonialismo en favor de la autodeterminación de los pueblos, nos hemos opuesto la USA Patrioc Act a favor de los derechos constitucionales y hemos exigido financiación para la educación y la salud y no para el militarismo.

Rechazar la 'internacionalización' de la ocupación

Pero igualmente tenemos que ser claros sobre dónde nos situamos en este movimiento emergente. Posiciones tales como la "internacionalización de la ocupación" dan al colonialismo una cobertura vendible y no deben ser aceptadas como opción viable por parte de este movimiento popular global. Esta es una época en la que la claridad política es un deber. No importa de dónde proceda, la noción de que el pueblo de Iraq "necesita algún tipo de intervención occidental" siquiera temporal para asegurar su propia estabilidad es abiertamente racista y constituye una amenaza real para la civilización. La autodeterminación debe excluir claramente la regresión a cualquier forma moderna de la época de los Mandatos [coloniales] de la Liga de la Sociedad de Naciones. Ese es el consenso popular internacional y debe serlo también para el movimiento y la opinión popular de EEUU.

El fin de la actual ocupación extranjera de Iraq y el fin de la destrucción y el exilio acumulado por el pueblo palestino son las dos caras inseparables de una misma tarea que requiere transformar nuestra visión del mundo y de nosotros mismos como mosaico que somos de un pueblo variable. Tenemos que conseguir formular una visión estratégica [que nos sirva tanto] para ser socios en una comunidad de naciones [como] para la construcción de nuestros barrios y nuestras escuelas locales.

No podemos seguir por el camino perpetuo de la confrontación entre [la política] interior y la exterior y la dominación

Todos a la calle el 20 de marzo

Nota de CSCAweb:

1. Sobre la denomindada "Acta Patriótica de EEUU" véase en CSCAweb: Guerra y represión: la 'USA-Patriot Act' recorta los derechos civiles y ataca las libertades fundamentales en EEUU bajo el pretexto de garantizar la "seguridad nacional"