Ningún gobierno establecido
por la injerencia exterior instaurará la democracia en
Iraq
10 de marzo de 2003. Nota CSCAweb (www.nodo50.org/csca)
Arguyendo el falso argumento
de la democratización de Iraq, la decisión del
"cambio de régimen"no puede ocultar que el objetivo
central de EEUU en Iraq es acabar, más allá de
con un gobierno, con un modelo de Estado que, gracias a la inversión
plena de los beneficios de un petróleo nacionalizado para
la promoción socio-económica del país y
de su población, se ha constituido como un referente de
desarrollo árabe no sujeto, además, desde finales
de los años 80, a los dictados económicos de la
globalización y el neoliberalismo impuestos por el intervencionismo
de EEUU ni al imperativo de la hegemonía regional militar
y económica de Israel en la región árabe
que avala firmemente Washington.
A pesar de
que los jefes de inspecciones de la UNMOVIC y de la Agencia Internacional
de la Energía Atómica (AIEA), Blix y Al Baredei
respectivamente han constatado en sus informes del pasado 7 de
marzo la cooperación activa de Iraq para avanzar en el
proceso de desarme que le exige la Resolución del Consejo
de Seguridad de NNUU (CS) 1441, la Administración Bush
mantiene su determinación de lanzar la guerra contra Iraq
incluso unilateralmente si el CS no acepta aprobar una nueva
resolución cuyo borrador ha quedado ahora modificado por
el ultimátum propuesto por Gran Bretaña y cuya
aprobación por el CS legitimaría los planes de
EEUU para Iraq.
La contundencia de un texto que niega la cooperación
de Iraq con las inspecciones y que no menciona explícitamente
el "uso de la fuerza"[1] pretende no solo contrariar
las afirmaciones de los inspectores de desarme sino, como ya
se hiciera previamente, favorecer a través de la ambigüedad
un acomodo de las posiciones reacias al belicismo intransigente
de EEUU, Gran Bretaña y España que, como la de
Francia, con su amenaza de veto, y las de México, Chile,
Guinea, Camerún, Angola y Pakistán, pueden socavar
los intentos de la Administración Bush de legitimar su
guerra contra Iraq al amparo del CS. En un plazo decretado hasta
el 17 de marzo, el juego de las presiones y las negociaciones
se mantiene en la esfera diplomática tensando una decisión
que, habida cuenta de las reiteradas declaraciones del presidente
Bush y de sus representantes oficiales en las últimas
semanas, no será determinante para el inicio de la invasión
y posterior ocupación de Iraq.
Mientras el discurso político en el marco del CS se
cierra exclusivamente en torno al incumplimiento iraquí
de las inspecciones de desarme ningún debate aborda
abiertamente el sentido de la guerra contra Iraq ni sus verdaderos
objetivos ilegítimos ya declarados por parte de EEUU-
la táctica inspirada y practicada por la Administración
Bush, y fortalecida por Gran Bretaña y España,
insiste en transmitir al CS y a la opinión pública
internacional que la decisión de la guerra depende exclusivamente
del gobierno de Iraq nunca mencionado explícitamente
y siempre representado en las intervenciones estadounidenses,
británicas y españolas en la figura de Sadam Husein.
La agresividad de las intervenciones el pasado 7 de marzo de
la representante del gobierno español, Ana de Palacio
y del gobierno británico, Jack Straw constituyen un ejemplo
más de la dinámica impuesta por la descalificación
y el insulto permanentes hacia el gobierno iraquí. Ello
no es ajeno a la decisión con que la Administración
Bush ha impulsado abiertamente en los dos últimos años
el objetivo esencial de "cambio de régimen"
en Iraq.
'Cambio de régimen'
El objetivo ilegal del "cambio de régimen"
(ya formulado por la Administración Clinton [1]],
contrario a la Carta de NNUU al operar en contra del principio
de no injerencia en los Estados, ha exigido a la Administración
Bush una reformulación mediática que, parapetada
en el siempre utilitario argumento esgrimido por EEUU ahora
también por los gobiernos de Gran Bretaña y España-
de la democratización y los derechos humanos en Iraq,
ha pasado finalmente a asumirse sin contestación por parte
de la comunidad internacional como si de un hecho legítimo
se tratase. Falsos adalides de la defensa de los derechos humanos,
EEUU, Gran Bretaña, España y con ellos todos quienes
defienden la intervención militar en aras de un cambio
interno en Iraq, obvian inmoral y calculadamente la violación
sistemática y generalizada perpetrada contra los derechos
humanos iraquíes vitales, económicos, sociales
y de desarrollo- que el CS ha practicado impunemente durante
los últimos doce años con la aplicación
un sistema combinado de guerra y embargo sin precedentes en la
historia universal de las sanciones internacionales contra cualquier
país.
Arguyendo el falso argumento de la democratización
de Iraq, la decisión del "cambio de régimen"no
puede ocultar que el objetivo central de EEUU en Iraq es acabar,
más allá de con un gobierno, con un modelo de Estado
que, gracias a la inversión plena de los beneficios de
un petróleo nacionalizado para la promoción socio-económica
del país y de su población, se ha constituido como
un referente de desarrollo árabe no sujeto, además,
desde finales de los años 80 a los dictados económicos
de la globalización y el neoliberalismo impuestos por
el intervencionismo de EEUU ni al imperativo de la hegemonía
regional militar y económica de Israel en la región
árabe que avala firmemente Washington.
Ese es el verdadero crimen de Iraq. Después
de doce años de sanciones genocidas, socavada su soberanía
en todas las facetas posibles económicas, territoriales
y militares a través de la imposición del desarme
unilateral- Iraq se ha mantenido gobierno y población-
como un elemento desestabilizador que, al igual que el pueblo
palestino con su Intifada, ha impedido a EEUU y a Israel la plasmación
hegemónica del "Nuevo Orden Regional"previsto
en 1991.
Ningún gobierno establecido por la injerencia exterior
instaurará la democratización en Iraq; por el contrario,
serán los intereses ajenos quienes acaben por desmoronar
los sólidos cimientos de un Estado que ha hecho del desarrollo
social su seña de identidad nacional.
Notas:
1.- El párrafo
final del texto propuesto reza: "[El CS] Decide que Iraq
ha fracasado en aprovechar la oportunidad final que le brindó
la resolución 1441 (2002) a menos que, el 17 de marzo
de 2003 o antes, el CS llegue a la conclusión de que Iraq
ha demostrado una cooperación plena, incondicional, inmediata
y activa conforme a sus obligaciones de desarme bajo la resolución
1441 y las resoluciones previas y relevantes, y haya rendido
a la UNMOVIC y a la AIEA todas sus armas, sistemas de apoyo y
distribución de armas, y estructuras prohibidas por la
resolución 687 (1991) y todas las resoluciones siguientes
relevantes, y toda la información relacionada con la destrucción
previa de las mismas. Decide permanecer atento a este asunto".
2.- Véase
en CSCAweb: Iraq:
¿Qué es el INDICT? - La Administración
Bush pone en marcha la primera fase para la invasión de
Iraq: hacer 'inevitable' la guerra, fabricar una 'alternativa
democrática' al actual régimen y Tras
el anuncio de Iraq de permitir el regreso incondicional de las
inspecciones de desarme, EEUU confirma que el objetivo de la
guerra es acabar con el régimen iraquí
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