Encuentro Internacional contra la Guerra
Madrid, 16 y 17 de noviembre de 2002
En solidaridad
con el pueblo iraquíCampaña Estatal por el Levantamiento de las Sanciones a Iraq.
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Intervención de Naim Abu Tair (Unión de Comités Populares de la Salud, Palestina)
Quisiera agradecer al Comité de Solidaridad con la Causa Árabe y a la Campaña Estatal por el Levantamiento de las Sanciones a Iraq, organizadores de esta Conferencia, la oportunidad que me brindan de dirigirme a Uds. en nombre de la Unión de Comités Populares de la Salud de Palestina. Quisiera igualmente enviar un mensaje de aprecio a todos ustedes y a los pueblos del Estado español por la solidaridad y el apoyo que nos han mostrado constantemente durante los últimos años. De hecho, el pueblo palestino necesita vuestra solidaridad como la de todos los pueblos del mundo que están comprometidos en el fin de la ocupación israelí de nuestro país. Antes de comenzar mi intervención, quiero asegurarles que el pueblo palestino continuará su lucha por la liberación y la independencia a pesar de la opresión y de los crímenes de guerra cometidos contra nuestro pueblo especialmente durante los dos últimos años. La situación en Oriente Medio en general y en Palestina está hirviendo y a punto de estallar en una gran explosión que puede traer imprevistas y desastrosas consecuencias para el mundo entero. Tales consecuencias no se limitarán a las fronteras del Mediterráneo sino que tendrán un alcance mucho mayor. Ello es el resultado lógico de la política hostil que la alianza de EEUU e Israel practican contra los países del Tercer Mundo. La actual Administración de EEUU, usando los trágicos sucesos del 11 de septiembre de 2001, está empujando al mundo hacia una situación de continuo y candente conflicto bajo el lema de "luchar contra el terrorismo internacional" o contra el "eje del mal". Utilizando un estilo fantasioso y exponiendo un comportamiento hipócrita, EEUU se está imponiendo como el emperador del mundo. El señor Bush decide quien está "con nosotros" y quién está "contra nosotros". El señor Bush decide qué religión es buena y qué civilización es mala. El señor Bush decide qué pueblos son luchadores por la libertad y qué pueblos son terroristas. Qué países son democráticos y cuáles no. Todo este sin sentido tiene un solo objetivo que es establecer la hegemonía de EEUU sobre el mundo. Ello se ilustra por lo siguiente:
En el momento actual Iraq parece ser la principal preocupación de la política exterior de EEUU. Incluso Bin Laden parece haber desaparecido de los noticiarios. ¿Cuáles son las verdadera razones de esta política?: Primero: crear un precedente en Iraq para cada país y régimen que se oponga a la política de EEUU golpeando aquellos que desafían proteger sus propios intereses nacionales. Segundo: alcanzar la hegemonía completa y el control sobre uno de los más importantes campos de petróleo del mundo. Tercero: proteger a Israel con el fin de mantenerlo como un aliado fuerte y firme para el futuro. Para ello, EEUU está presionando al resto del mundo para que adopte su política. EEUU está presionando de manera bochornosa a todos los países para que participen en una guerra injustificada. EEUU no está defendiendo ni la democracia ni los derechos humanos. EEUU ni siquiera está defendiendo a los regímenes reaccionarios de los emires y de los sheijs de la región del Golfo que han sido obedientes servidores de EEUU. EEUU está simplemente defendiendo sus propios intereses, sin consideración por las miles y quizá millones de personas que perderán sus vidas pagando el precio para no permitir que eso ocurra. No es sorprendente encontrar una armonía total entre EEUU e Israel, que está tocando los tambores de guerra constantemente y propagando una guerra adicional contra Irán, una vez que la guerra contra Iraq concluya como Sharon declaró al periódico Times el 5 de noviembre de 2002- desairando los intereses nacionales de Europa. (Hasta ahora, Gran Bretaña se distingue del resto de Europa por estar del lado de EEUU desde el comienzo). EEUU está intentando contener a las Naciones Unidas y chantajear a sus organizaciones, haciendo de ellas un instrumento que sirva a sus propios intereses imperialistas. Esto conducirá probablemente a que Naciones Unidas pierda su estatuto moral y legal sobre el cual se fundó en 1945. El inminente ataque contra Iraq debe pararse ahora antes de que sea demasiado tarde. El segundo aspecto a través del cual EEUU ejecutará su hegemonía en Oriente Medio es la cuestión palestina que ha permanecido abierta y no cerrada desde 1948. Para empezar, debemos decir que el problema palestino es una cuestión central en la conciencia de la Nación Árabe que necesita desde el punto de vista de EEUU una solución inmediata. Y en este punto es donde podemos ver mejor la interacción de Israel con EEUU que es más que un simple socio estratégico. Del mismo modo que Israel adopta la visión imperialista de EEUU, EEUU apoya a Israel incondicionalmente. La parte peligrosa de esta alianza es la alianza entre los nuevos conservadores de la Administración de EEUU y la extrema derecha religiosa y sionista de Israel. Esto se observa mejor en el discurso del presidente Bush del 24 de junio de 2002. El Sr. Bush declaró que "Israel tiene derecho a defenderse" y que Sharon es un "hombre de paz", sin mencionar la ocupación militar ilegal e inhumana de Israel desde 1967. El movimiento de resistencia palestino fue declarado [por Bush] terrorista e ilegal. Incluso fue más allá al declarar que la dirección palestina debía cambiarse, posiblemente por un liderazgo títere surgido de la noche a la mañana como un gobierno de Vichy. Las estructuras palestinas deben de reformarse de tal modo que se apruebe y se legitime la política de la ocupación israelí y la construcción de asentamientos como su manifestación colonial sobre el terreno. De manera directa, el Sr. Bush declaró ilegales a todos los partidos políticos palestinos -sean nacionalistas, islamistas o de izquierda- si no se ajustan al tono procedente de Washington. El presidente Bush e Israel han incumplido todas las resoluciones internacionales que exigen a Israel que se retire de los Territorios Ocupados y que reclaman el derecho de los refugiados palestinos al retorno, y han intentado imponer sus propias resoluciones a su medida. Una vez dada la luz verde, Sharon la ha utilizado para continuar con su destrucción de la comunidad palestina que comenzó en marzo de 2002. Esto se manifiesta por si mismo en la reocupación de ciudades y aldeas; en la imposición de los cierres; en los toques de queda; en las detenciones masivas que incluyen a prominentes figuras políticas como el Dr. Marwan Barghouti, Ahmad Saadat y Abdel Rahim Mallouh; en la política de asesinatos; en la destrucción de hogares; en las extracciones de árboles y en el aumento de la construcción de asentamientos y carreteras de circunvalación, además de en cómo se sigue separando Jerusalén de los palestinos y, finalmente, en el cerco y en la destrucción del recinto de Arafat. Todo ello ha ocasionado una enorme destrucción de la economía palestina y de la infraestructura que ha desgarrado a la comunidad palestina y que sufre el aumento de la pobreza y el desempleo además de del dolor y el miedo cotidianos. Sin embargo, el movimiento de resistencia palestino, como atestigua la firmeza legendaria del pueblo donde quiera que esté, en sus ciudades, aldeas o campamentos de refugiados; en sus prisiones, entre sus escombros y sus tierras arrasadas por los buldózeres, siguen diciendo aún un NO rotundo a EEUU y un NO rotundo a la rendición. El pueblo palestino no permitirá que el poder brutal de Sharon se convierta en un triunfo político. El pueblo palestino no tiene otra elección que seguir con el movimiento de resistencia hasta que la ocupación acabe. Y si Bush quiere paz en Oriente Medio, entonces no tiene otro deber que acabar con la ocupación israelí. Israel puede elegir seguir ocupando Palestina y Bush puede elegir ocupar Iraq, pero eso no pondrá fin de ningún modo al movimiento de resistencia contra Israel y EEUU, y nunca conducirá a la paz. Creemos que nuestro movimiento de resistencia forma parte de un gran movimiento de resistencia internacional contra la opresión, la injusticia y la desigualdad. Queremos expresaros a todos nuestro agradecimiento por apoyarnos con vuestra solidaridad no solo porque estamos sufriendo la opresión, la injusticia y la desigualdad sino también porque vosotros, de ese modo, estáis defendiendo vuestros propios valores. Gracias |
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