Palestina: el termómetro infalible de la verdad

Index | Palestina 2011
Actualidad
PALESTINA

Palestina

 

Palestina: el termómetro infalible de la verdad

Jalil Sadaka

Hay que decirlo con claridad, o los países de la Alianza Atlántica cambian sus planteamientos en relación con el asunto palestino, en función del derecho internacional, o se arriesgan a perder sus intereses en el nuevo mundo árabe.

CSCA

red

Israel aprovecha que los focos informativos se centran en la guerra contra Libia para seguir cometiendo nuevas masacres en la Franja de Gaza, y afianzar su ocupación de toda Palestina, sin atender las resoluciones de las Naciones Unidas, ni los demandas de la toda la comunidad internacional. La última de estas masacres se cometió el día 22 de marzo, misiles de ejército israelí lanzados desde aviones han matado en un solo día a ocho palestinos entre ellos tres niños de corta edad mientras jugaban al futbol en un descampado de su barrio. Los testigos oculares de la matanza hablan de una escena horrenda, cuerpos de niños de la más tierna infancia, destrozados e irreconocibles.

No cabe equivoco alguno, los niños eran absolutamente identificables para los aviones de reconocimiento que vigilan la Franja día y noche. De modo que Israel no puede alegar que eran combatientes que se aprestaban a lanzar sus cohetes artesanales contra los asentamientos del sur. El objetivo de la  matanza es imponer el terror y matar deliberadamente.

Los agentes israelíes han secuestrado un ingeniero palestino de Ucrania, y lo han llevado a sus cárceles para interrogarle. Un acto de piratería de los que nos tiene acostumbrados.

Amenaza de impedir, u boicotear cualquier conciliación palestina.
 
El Consejo de Seguridad de la ONU no ha sido convocado a una reunión, ni urgente ni ordinaria, no se espera que lo haga ni que tome ninguna decisión de condena, ni va a imponer sanciones, o decretar una zona de exclusión aérea sobre Gaza, lo afirmamos con rotundidad en base a las experiencias anteriores, y sobre todo porque palestina no tiene petróleo. De modo que los palestinos no esperan que los portaaviones, ni las fragatas, ni los submarinos de los países de la OTAN se dirijan  hacia las costas de Gaza, ni que las bases británicas en Chipre, ni las francesas de Córcega y Cerdeña, decreten una alerta humanitaria. Israel goza de total inmunidad, y puede hacer lo que le plazca, atacar Gaza o el Sur del Líbano. Cualquier tentativa de algún osado país de pedir una condena a Israel, será rechazada por el veto norteamericano.

Así que no se espera que nada ni nadie vaya a pedir a los aviones F-16, F-15 “made in USA”, que dejen de bombardear a la población palestina, pueden seguir haciéndolo libremente, puesto que los palestinos no son libios, siendo como ellos árabes y musulmanes en su mayoría, pero les diferencia el oro negro.          
    
Las experiencias anteriores nos indican que, ni el sr. Amro Musa, secretario general de la Liga de los Estados Árabes, ni todos los jefes de estados árabes, vayan a prestar la debida atención a la  matanza de Gaza por considerarla un asunto menor. Esta es la conclusión lógica basada en su actitud hacia lo ocurrido en Gaza a finales del 2008 y comienzos del 2009, cuando este territorio de 350 km2, y una población de más de 1,7 millones, fue sometido durante tres semanas a un intenso bombardeo israelí por tierra mar y aire, causando 1400 víctimas.

En este caso las víctimas palestinas no tienen nombre, ni nadie que les llore, y que el general que manda el ejecito israelí no tiene a nadie que le rechiste. Si un intrépido juez de Audiencia Nacional se atreve a admitir una demanda criminal contra él o sus compañeros, ahí estarán las autoridades para evitarlo, incuso cambiar la ley si hace falta. Hay víctimas con categoría VIP, otras anónimas, según la  clasificación de los defensores de los derechos humanos. 

Una vez más los países colonialistas que han tejido una gran alianza para castigar al líder libio por sus crímenes, pierde la oportunidad de demostrar su sinceridad a la hora de defender los derechos humanos y recuperar la credibilidad ante los pueblos árabes, que han demostrado que no se les puede tratar como a borregos, y se sienten ya sujetos con derechos, y como tal reclaman ser considerados dueños de su destino o al menos soberanos a la hora de tomar postura respecto a los demás.

Hay que decirlo con claridad, o los países de la Alianza Atlántica cambian sus planteamientos en relación con el asunto palestino, en función del derecho internacional, o se arriesgan a perder sus intereses en el nuevo mundo árabe. Si las principales potencias de Europa y EE.UU, planean  controlar los cambios en el mundo árabe, con el propósito de conservar sus intereses, mediante  eufemismos como colaborar con las nuevas democracias, sin cambiar su postura en relación con Israel, todo su esfuerzo será en vano, solo será una cuestión de tiempo que los pueblos árabes descubran las maniobras. No les será difícil. Porque tienen un termómetro infalible para medir la  sinceridad de los países que se muestran incluso dispuestos a ir a la guerra para salvar a los pueblos de las persecuciones, este termómetro se llama Palestina.