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Frente Popular para la Liberación de Palestina

41 Años de lucha, union nacional y defensa del Derecho al Retorno

El proyecto de "supresión de identidad" que se ha estado llevando a cabo desde los años del Naqba en el 48 con el pueblo palestino adopto nuevas formas de aplicación en Líbano. Las leyes discriminatorias aplicadas por el Gobierno libanes, violatorias de los derechos humanos; el control estricto sobre los campos de refugiados y la negativa de los derechos civiles a los refugiados palestinos han fracasado en su aplicación ya que el pueblo palestino expatriado en Líbano se ha inmunizado contra estas impunes medidas y resiste ante su indigna situación de miseria en Líbano

María Cristina Portales Carrandi, Ein El-Hilweh Camp – 15 de Diciembre 2008
CSCAweb

FPLP

Ein El-Hilweh Camp – 15 de Diciembre 2008

El proyecto de “supresión de identidad” que se ha estado llevando a cabo desde los años del Naqba en el 48 con el pueblo palestino adopto nuevas formas de aplicación en Líbano. Las leyes discriminatorias aplicadas por el Gobierno libanes, violatorias de los derechos humanos; el control estricto sobre los campos de refugiados y  la negativa de los derechos civiles a los refugiados palestinos han fracasado en su aplicación ya que el pueblo palestino expatriado en Líbano se ha inmunizado contra estas impunes medidas y resiste ante su indigna situación de miseria en Líbano.

El fracaso de estas ‘medidas’, justificadas hasta ahora por la Autoridad Libanesa con el velo del derecho al retorno del pueblo palestino expulsado de sus tierras de origen a la Palestina vecina y que no son mas que una moderna forma de tortura psicológica, física y una nueva forma exterminio a fuego lento justificado; han hecho que los métodos cambien a la antigua estrategia aplicando el termino ‘guerra contra el terrorismo’: La muerte; terrorismo sembrado y alimentado desde fuera de los campos, contra los campos.

La destrucción del campamento Naher El-Bared, cercano a la ciudad Trípoli – norte libanes, fue el prototipo de estudio utilizado por la Administración Libanesa. Los resultados obtenidos no fueron los pronosticados según los mecanismos de la seguridad y las tropas del ejercito libanes involucradas a fuerza; aun así las maniobras y preparaciones para la destrucción continúan, y en la mirilla están: Al-Baddawi – Trípoli, y la capital de los refugiados palestinos, Ein El-Hilweh – Sidón, como próximos objetivos.
Los acuerdos de seguridad con Israel, o la renovada defensa de la llamada pacificación en la zona, no han sido más que la continuación de las continuas agresiones, el bloqueo y el asesinato de nuestro pueblo condenado a muerte lenta. El resultado de esta formula es: Paz por Comida.”…”No aceptamos dos proyectos en nuestra tierra, exigimos el respeto a la democrática decisión de la casa palestina, como respeto a la decisión del pueblo palestino.”

Sobre la situación en Líbano, específicamente sobre la pregunta “¿Que queremos nosotros de Líbano?...”, AbdulAaal, ilumino sobre la necesidad de reconocer mediáticamente que la comunidad palestina es una comunidad positiva y no negativa como la hacen ver provocando lo que hoy llaman palestino-fobia; nuestro pueblo desea el bien y la seguridad del país que le acoge; defiende una causa, una identidad y una cultura patriótica; tiene una visión nacionalista y no es una subasta en el mercado político.

“…Mirando sobre el dialogo del Gobierno libanes, y retomando el discurso de juramento presidencial del Presidente de la República libanesa: entregar los derechos a los palestinos excluye su nacionalización, y no al revés, y la herida de Naher El- Bared fue victima del terrorismo sobre Líbano y el pueblo palestino, y es reconocido que los sucesos de Naher El-Bared fueron excepcionales y no son tomados como una base o regla.”…”El FPLP aclara que los campamentos palestinos, no son el pasadizo o se prestan para cualquier tipo de violación de la seguridad de Líbano.”
AbdulAal exigió el reconocimiento de los derechos civiles y humanos de los refugiados palestinos por parte de la Administración libanesa; así como la protección tanto para el pueblo libanes como palestino contra el proyecto de nacionalización y/o destierro de Líbano, reconociendo la existencia temporal del pueblo palestino en Líbano producto de condiciones extraordinarias causadas por la ocupación de su tierra, tratando el caso como un pueblo en resistencia nacional, y no de la manera discriminatoria que se le trata actualmente.