Los servicios médicos
en Cisjordania, al borde del colapso
EFE
/ CSCAweb: 4-12-06
La crisis
política que impide crear un gobierno palestino de unidad,
forzado por los países occidentales, para superar el boicot
internacional impuesto al Gobierno de Hamás del primer
ministro Ismail Haniye ha dejado al borde del colapso los servicios
médicos en Cisjordania.
En la franja autónoma
de Gaza, en cambio, fuentes médicas informaron hoy de
que en ese territorio, donde las operaciones militares de Israel
oficialmente terminaron hace una semana al entrar en vigor el
actual alto el fuego, la atención médica era normal.
En Cisjordania 1,5 millones
de habitantes no reciben atención médica debido
al paro, y fuentes médicas pronostican una 'catástrofe'
para el invierno entrante por falta de vacunas. Los servicios
que solía prestar la Autoridad Nacional Palestina (ANP)
están afectados por una huelga de tres meses del personal
médico debido a que el Gobierno de Haniye no puede abonar
los salarios, informa este fin de semana el diario israelí
Haaretz.
Decenas de clínicas
rurales de Cisjordania están cerrados debido a la huelga,
informa este fin de semana el diario Haaretz al informar de la
grave situación económica y en la salud pública,
que se suma a las duras restricciones impuestas por el Ejército
israelí.
Las clínicas y dispensarios
de Hamás, en cambio, permanecen abiertos, y también
los institutos médicos privados a los que tienen acceso
sólo la minoría de familias que pueden pagar 100
dólares diarios por día de hospitalización,
agrega.
Los funcionarios públicos,
cuyo número se calcula en unos 160.000, y entre estos
los maestros, los del servicio de sanidad y las fuerzas de seguridad,
están cobrando 'anticipos a cuenta' desde marzo de este
año, cuando Haniye asumió sus funciones.
El ministro de Exteriores,
Mahmud a-Zahar regresó esta semana del exterior a Gaza
con 20 millones de dólares en sus maletas para abonar
esos anticipos. Los bancos se niegan a hacer transferencias por
temor a represalias de los países que participan en el
boicot.
El cerco que impide la transferencia
de fondos a la ANP lo impusieron el Cuarteto de Madrid -Estados
Unidos, la Unión Europea (UE), Rusia y la ONU-, e Israel,
que por un acuerdo con el ex presidente Yaser Arafat, es su agente
de retención de impuestos.
Israel está reteniendo
ya 600 millones de dólares y, según fuentes palestinas
citadas por el diario Haaretz, los donantes árabes residentes
en Estados Unidos dejaron de transferir sus aportes alegando
que como ciudadanos de ese país lo tienen prohibido.
El boicot se debe a que Hamas
se niega a cumplir con tres exigencias del Cuarteto: desarmar
a su milicia, reconocer al Estado hebreo, y respetar los acuerdos
previos de la ANP con Israel desde los de Oslo, de 1993.
El Comité Ejecutivo
de la Organización para la Liberación de Palestina
(OLP), encabezado por el presidente de la ANP, Mahmud Abás,
llamó ayer en la ciudad cisjordana de Ramala a Haniye
a dimitir para liberar al pueblo del boicot y permitir la creación
de un nuevo gobierno.
Los principales hospitales
de la populosa ciudad de Naplusa, Rafidíe y Al-Uatani,
que presta servicios de ginecología, sólo atienden
casos de emergencia, y sus salas están vacías.
La Organización de Médicos
Israelíes por los Derechos Humanos, que presta servicios
los fines de semana en Cisjordania ha experimentado un gran aumento
en las demandas de atención debido a la huelga de sus
colegas, informó su director, Salah Haj Yahya.
'Nuestra huelga es contra el
Gobierno palestino y contra la comunidad internacional', dijo
al matutino Haaretz el cardiólogo Husam Jawhari, director
del hospital Al-Uatani, quien ha cobrado sólo un quinto
de sus salarios de los últimos ocho meses. 'Sería
un crimen si no prestara mis servicios pero merezco que me paguen',
dijo el médico. Su hospital, debido al paro del la mayoría
del personal, está medio vacío, y atiende principalmente
a enfermos de cáncer o de los riñones, que necesitan
de diálisis.
|