Documento de los presos palestinos
por la reconciliación nacional
CSCAweb,
17 de julio de 2006 - Traducción: Jalil Sadaka
"Repudiar
cualquier signo de división, o desunión, por el
peligro de enfrentamiento que pueda acarrear, condenando el uso
de las armas bajo cualquier pretexto, como medio de solventar
las discrepancias. Declaramos abolido definitivamente el recurso
a la fuerza, considerando cualquier eventualidad de derramamiento
de sangre Palestina como un sacrilegio, hacemos hincapié
en el dialogo como único medio de solventar las desavenencias,
defendemos la libre expresión de opiniones, incluso la
el derecho ejercer la oposición contra el poder ejecutivo,
en el marco de la legalidad, solicitamos garantizar el derecho
a la manifestación, pacifica, y el respete a los ciudadanos
y sus propiedades, dentro del marco de los intereses públicos".
Partiendo de nuestra gran responsabilidad
histórica nacional, conscientes de los graves peligros
que acechan a nuestro pueblo, con el propósito de consolidar
el frente interno palestino, salvaguardar la unidad nacional
de nuestro pueblo en el interior y la diáspora, con el
objetivo de hacer frente al proyecto que el gobierno israelí
se dispone a poner en practica paralelamente al termino de la
construcción del muro del apartheid, la puesta
en practica del plan de judaización de la ciudad de Al-Quds
[Jerusalén], y la ampliación de los colonias, el
control total del valle de Jordán, y la anexión
de amplias zonas de CisJordania, todo ello con finalidad de
imponer una solución unilateral, que daría al
traste no solo con los anhelos del pueblo, sino también
a su derecho de crear su propio estado soberano independiente
y a impedir definitivamente con el derecho al retorno de los
refugiados palestinos
Con el fin de salvaguardar
los logros obtenidos después de una larga lucha, fieles
a la sangre de los mártires, al sufrimiento de los presos,
y al dolor de los heridos, conscientes de que estamos ante una
fase de liberación nacional de carácter esencialmente
democrática, que requiere una estrategia política
de lucha acorde con todos estos desafíos.
Y con el propósito de
garantizar el éxito de un dialogo palestino lo más
amplio posible, inspirado en los Acuerdos de El Cairo, y como
una necesidad urgente de consolidar la unidad nacional.
Por todo ello ponemos este
documento (Carta de Reconciliación Nacional), ante la
consideración de nuestro pueblo, su presidente Abu Mazen,
la dirección de la OLP, al presidente del gobierno Ismael
Haniya, al presidente y los miembros de Consejo Nacional, al
presidente y los miembros de Consejo legislativo, a todas los
fuerzas y organizaciones combatientes palestinas, a todos las
organizaciones de la sociedad civil en el interior y la diáspora,
y a los lideres de opinión y dignatarios palestinos. Con
el ruego de que contemplen el presente documento como un todo
único e indivisible, y que lo consideren como una aportación
a los esfuerzos en la búsqueda de una reconciliación
nacional definitiva.
1.- El pueblo palestino en
el interior y la diáspora, lucha por la liberación
de su tierra, para disfrutar de su propia libertad, de su derecha
al retorno, la independencia, y la autodeterminación,
como etapa previa a la creación de su estado independiente
sobre toda la tierra ocupada en 1967, con capital en Al Quds,
incluido el derecho del retorno de los refugiados y la liberación
de todos los presos. Todo ello en base a los derechos históricos
de nuestro pueblo en las tierras de sus antepasados, la Carta
de la Naciones Unidas y del derecho internacional, por lo tanto
se siente asistido con toda la legitimidad internacional.
2.- El cumplimiento de los
acuerdos de El Cairo firmados en marzo 2005, que se refieren
a la reforma y renovación de la Organización para
la Liberación Palestina, OLP, facilitando la integración
de los movimientos de Hamas y la Yihad. Para que esta organización
pueda recuperar su papel como único y legítimo
representante de pueblo palestino, ante todas las instituciones
del mundo, de conformidad con los cambios habidos en el escenario
palestino y las normas democráticos, y con el propósito
de consolidar la legitimación de un liderazgo único
representativo de todo el pueblo palestino, lo que permitiría
a la OLP recuperar su papel como defensor de los derechos nacionales,
(políticos, sociales), ante todos los organismos internacionales
y regionales. El interés nacional palestino requiere la
formación, antes del fin del presente año 2006
de un nuevo Consejo Nacional, en su seno se garantizaría
la representación de todas las fuerzas, grupos, partidos
patrióticos e islámicos, las agrupaciones y sectores
políticos sociales, de masas. Todo ello requiere la transformación
de la estructura de la OLP en un frente amplio y una coalición
nacional de todos los palestinos del interior y la diáspora,
y en un referente político de alto nivel.
3.- El derecho inalienable
del pueblo palestino a la resistencia, con todos los medios,
es una opción irrenunciable. El escenario de la resistencia
debe centrarse en los territorios ocupados de 1967, en paralelo
con las acciones políticas, las negociaciones diplomáticas,
y la lucha de masas contra la ocupación, en todas sus
manifestaciones y políticas. Es necesario ampliar la participación
de la resistencia a todos los colectivos, y sectores de nuestro
pueblo.
4.- Proponer un plan palestino
de acción política global, con un único
discurso político basado en el consenso nacional palestino,
la legalidad árabe, las resoluciones legitimadas por el
derecho internacional. Este plan lo llevarían acabo,
de forma coordinada, la OLP, la Autoridad Nacional palestina
gobierno y presidencia-, los grupos patrióticos,
e islámicos, todos los sectores de la sociedad civil
y el resto de los grupos y colectivos, con fin de remover el
apoyo árabe, islámico, e internacional, recabando
todo tipo de contribución política, financiera,
económica y humanitaria necesaria para nuestro pueblo
y su Autoridad Nacional, todo ello encaminado a posibilitar el
ejercicio del derecho a la autodeterminación, la liberación
nacional, y la independencia, y abortar los intentos de Israel
de imponer una solución unilateral, y acabar con el injusto
bloqueo que sufre nuestro pueblo.
5.- Preservar y consolidar
la ANP, como germen del futuro estado palestino, teniendo en
cuenta que la creación de este Autoridad fue posible gracias
a la sacrificada y continuada lucha de nuestro pueblo. El interés
nacional se basa en el respeto a la Carta Nacional Provisional
y las leyes vigentes. Las responsabilidades y competencias del
presidente elegido democráticamente, deben respetarse,
al igual que las responsabilidades y las competencias del gobierno
que goza de la confianza otorgada por Consejo legislativo. Es
de vital importancia la colaboración entre la institución
presidencial y el gobierno, debiendo trabajar conjuntamente en
la subsanación de cualquier diferencia, mediante el dialogo
fraternal, esta colaboración debe basarse en la Carta
Nacional Provisional y en el interés patriótico.
Creemos que es necesaria una reforma global de las instituciones
de la Autoridad Nacional, en especial el sistema judicial, cuyas
decisiones deben gozar del respeto escrupuloso de todos, en
el marco del imperio de la ley.
6.- Formación de un
gobierno de unidad nacional que garantice la participación
de todos las fuerzas parlamentarias que lo deseen, especialmente,
Al-Fatah y Hamas y que aceptan este documento como base de la
acción conjunta para la recuperación del papel
palestino en el marco local, árabe, regional e internacional.
Hacer frente a los grandes desafíos requiere un gobierno
de concentración nacional fuerte, con amplios apoyos de
todo el espectro político y de masas a nivel interior,
árabe, e internacional. Este apoyo le permitiría
acometer las reformas, luchar contra la pobreza, el paro, y presentar
los mejores servicios a las clases sociales que han soportado
el mayor esfuerzo de resistencia, y la intifada, y a aquellos
que han sido victimas de las agresiones criminales de Israel,
sobre todo las familia de los caídos, los presos, los
mutilados, los sin hogar, y aquellos que sufrieron la destrucción
de sus propiedades, como consecuencia de la ocupación,
sin olvidar a los parados de larga duración y los recién
licenciados.
7.- La gestión de las
negociaciones es responsabilidad de la OLP y del presidente de
la ANP, la meta de estas negociaciones debe ser el cumplimiento
de los objetivos nacionales palestinos. Cualquier acuerdo definitivo
debe ser aprobado por el nuevo Consejo Nacional Palestino (CNP)
o directamente por el pueblo través de un referéndum,
siempre que sea posible.
8.- Obtener la liberación
de los presos por todos los medios es una tarea irrenunciable
de todas las fuerzas y grupos patrióticos y islámicos,
la OLP, la ANP (Presidencia, Ejecutivo, y Consejo legislativo),
y el resto de las formaciones de la resistencia.
9.- Es necesario redoblar los
esfuerzos para prestar el máximo apoyo y asistencia a
los refugiados, y defender sus derechos. Proponemos la organización
de un congreso popular representativa de los refugiados, del
que se derivará un órgano de seguimiento, cuya
tarea principal defender el derecho del retorno, e instar a la
comunidad internacional a hacer cumplir la resolución
194, que reconoce el derecho del retorno de los refugiados, o
su indemnización.
10.- La formación de
un frente único de resistencia, se llamaría Frente
de Resistencia Palestino FRP, cuyo objetivo es dirigir la resistencia
contra la ocupación, y coordinar sus acciones, además
debe crearse un marco político unificado de dicho Frente
de Resistencia.
11.- El sistema democrático es un logro irrenunciable,
que incluye las elecciones generales periódicas, elecciones
presidencial, municipal y local, respetar la alternancia en el
poder, la pluralidad y la defensa del proceso democrático
palestino, el imperio de la ley, las libertades públicas,
la libertad de expresión, la igualdad de derechos y deberes
de todos los ciudadanos, sin discriminación por cualquier
razón o condición, también deben respetarse
los logros obtenidos en los derechos de la mujer.
12.- El rechazo y la condena
al bloqueo injusto al que nos someten Israel y EE.UU. Instando
a los árabes (pueblos y gobiernos) para que presten el
máximo apoyo al pueblo palestino, la OLP, y ANP, y para
que cumplan los acuerdos aprobados en las sucesivas cumbres árabes,
referentes al apoyo financiero, político, económicos
e informativos a nuestro pueblo y que nos proveen de los medios
necesarios para la defensa de nuestra justas causas. Paralelamente
reafirmamos el compromiso de la Autoridad Nacional Palestina,
en defensa del consenso ínter árabe, y acción
árabe conjunta.
13.- Instamos a nuestro pueblo
a mantener el máximo grado de cohesión interna,
a apoyar y sostener sus instituciones como la OLP, ANP (presidencia
y ejecutivo), y afianzar su resistencia ante las agresiones,
y el bloqueo, rechazando cualquier ingerencia en sus asuntos.
14.- Repudiar cualquier signo
de división, o desunión, por el peligro de enfrentamiento
que pueda acarrear, condenando el uso de las armas bajo cualquier
pretexto, como medio de solventar las discrepancias. Declaramos
abolido definitivamente el recurso a la fuerza, considerando
cualquier eventualidad de derramamiento de sangre Palestina como
un sacrilegio, hacemos hincapié en el dialogo como único
medio de solventar las desavenencias, defendemos la libre expresión
de opiniones, incluso la el derecho ejercer la oposición
contra el poder ejecutivo, en el marco de la legalidad, solicitamos
garantizar el derecho a la manifestación, pacifica, y
el respete a los ciudadanos y sus propiedades, dentro del marco
de los intereses públicos.
15.- El interés nacional
requiere la búsqueda de los medios mas adecuados para
posibilitar la participación de la población de
la Franja de Gaza y sus fuerzas políticas, en la batalla
por la libertad, el retorno, la independencia, y la liberación
de la Ribera Occidental del Jordán, incluida la ciudad
santa de Al-Quds de modo que permita que la Franja de Gaza se
convierta en un verdadero motor de movilización y resistencia
de la población de la Ribera Occidental y Jerusalén.
El interés general requiere reevaluar los medios y los
métodos de la lucha en aras a una mayor eficacia contra
la ocupación.
16.- Es necesario acometer
las reformas de todos los organismos de seguridad palestina sobre
nuevos fundamentos más acordes con los tiempos, con el
objetivo de elevar su eficacia a la hora de acometer sus misiones
de defensa del ciudadano, y de la patria frente a las agresiones
y la ocupación, el mantenimiento de seguridad del orden
público, con pleno respeto a las leyes, acabar con el
desorden, al anarquía, y las manifestaciones armadas.
Esta situación perjudica gravemente a la lucha de nuestro
pueblo en su imagen exterior, aparte de construir una amenaza
para la cohesión de la Sociedad Palestina. Es necesario
coordinar y canalizar las relaciones con las fuerzas y formaciones
de la resistencia del modo más adecuado para salvaguardar
las armas de la resistencia.
17.- Instar al Consejo Legislativo
a proseguir sus trabajos aprobando el reglamento por el que
se deben regir la institución de seguridad con todos sus
órganos y fuerzas de seguridad. El Consejo debe aprobar
la ley que impide a las fuerzas de seguridad la afiliación
política y respeto la autoridad política libremente
elegida en el marco de la ley.
18.- Facilitar la presenciar
de las organizaciones internacionales de paz y solidaridad, para
defender la resistencia y la justa lucha de nuestro pueblo contra
la ocupación, las colonias, el Muro del apartheid,
y por el cumplimiento de la resolución de la Corte Internacional
de Justicia de La Haya contra el Muro.
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