Index | Dossier 'Iraq 2005'
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IRAQ


Latinoamérica solidaria con los pueblos de Palestina e Iraq

* Ana Vera es miembro de la Asociación Americana de Juristas.

Nota del CSCA:
La presente intervención de la doctora Ana Vera se produjo el día 18 de marzo en la reunión anual que la Comisión de Derechos Humanos de la ONU realiza en Ginebra (Suiza).
El día 31 de marzo la Internacional para el Desarrollo Educacional, la Unión de Juristas Árabes el Congreso Mundial Musulmán, la Asociación Internacional contra la Tortura y el Consejo Mundial por la Paz realizaron su intervención. Todas estas organizaciones coincidieron en criticar la ocupación de Iraq y la consideraron como "la principal causa de violación de los derechos humanos de ese pueblo árabe" en los aspectos económicos, sociales y culturales.
La Internacional para el Desarrollo Educacional se centró en la destrucción de Faluya.
La Unión de Juristas Árabes calificó de "promesa incumplida" la reconstrucción del país anunciada por los EEUU tras el fin oficial de la guerra, en mayo de 2003, y recordó el embargo a que ha estado sometido el país desde 1990 al 2003. La intervención de su representante se centró en las restricciones y carencias que sufre la población en lo referente a alimentos, combustible y agua potable.
El Congreso Mundial Musulmán y el Consejo Mundial por la Paz se centraron en la ocupación de Iraq como violación del derecho a la libre autodeterminación de los pueblos, así como la violación de los derechos económicos, sociales y culturales.
La Asociación Internacional contra la Tortura reflejó en su intervención la situación en las cárceles iraquíes, donde hay 10.500 presos políticos, de ellos 9.300 están detenidos en las cárceles de Abu Ghraib y Camp Cropper, próximas a Bagdad, y Camp Bucca, en el sur. Esta asociación recordó que el 14 de septiembre de 2003 se autorizó la privación sensorial de los prisioneros al tiempo que se les sometía a posiciones dolorosas y todo tipo de vejámenes.

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Latinoamérica solidaria con los pueblos de Palestina e Iraq

Declaración ante la Comisión de Derechos Humanos de la ONU sobre Haití e Iraq

Ana Vera*

Asociación Americana de Juristas, 18 de marzo de 2005
CSCAweb (www.nodo50.org/csca), 1 de abril de 2005

Diferentes entidades de todo el mundo, juristas y organizaciones no gubernamentales, han intervenido en la Comisión de Derechos Humanos de la ONU para denunciar la ocupación de Iraq en todas sus vertientes: violación de derechos humanos, saqueo cultural, reconversión al ultraliberalismo económico, celebración de elecciones y cambio de Constitución bajo la bota del ocupante extranjero, destrucción de ciudades y la violación del derecho a la libre autodeterminación de los pueblos. Este tipo de entidades, miembros de la Comisión de Derechos Humanos de la ONU, tienen carácter consultivo.

Un año después del golpe de estado promovido y ejecutado por Estados Unidos y Francia en Haití, la situación en dicho país es catastrófica en todos los sentidos, como lo reconoce la declaración del Consejo de Seguridad del 9 de marzo último. De los 1.080 millones de dólares comprometidos en la Conferencia de donantes de Washington han llegado sólo 90 millones, el 50% de los cuales está asignado a la preparación de elecciones para el último trimestre del año.

Las tropas que los Gobiernos latinoamericanos enviaron con la justificación o con la esperanza de pesar en las decisiones de la comunidad internacional sobre el futuro de Haití se ven reducidas al papel de espectadoras más o menos pasivas. El poder de decisión lo siguen teniendo las grandes potencias intervencionistas que no quieren para Haití ni la democracia, ni el bienestar ni la autodeterminación.

La Minustah, carente de medios materiales y políticos, ha sido incapaz de desarmar a las bandas que el nuevo gobierno integró mayoritariamente a la policía, reforzada también con ex militares golpistas. Los excesos de poder y las violaciones de los derechos humanos forman parte de la vida cotidiana en los suburbios pobres de Puerto Príncipe, Cité Soleil y Bel Air.

Como consecuencia de la huelga de hambre que inició el 19 de febrero, peligra la vida de Yvon Neptune, ex primer ministro del gobierno de Arístide, preso sin cargos y en total aislamiento en la cárcel de Puerto Príncipe. En la misma situación se encuentra Jocelerme Privert, ex ministro del Interior.

Anexamos a esta declaración la carta escrita desde la cárcel por Yvon Neptune, también dirigida a esta Comisión:

Señor Presidente:

En el documento NGO 279, la AAJ y el CETIM describen la situación en Iraq, donde Estados Unidos y sus aliados más cercanos han violado y continúan violando el derecho internacional a una escala sin precedentes desde la segunda guerra mundial, incluidos los derechos humanos y el derecho humanitario. Han aprovechado la ocupación militar para confiscar en su propio beneficio los recursos naturales y económicos de dicho país y por propia decisión y sin intervención alguna de los iraquíes han reconvertido el sistema económico al ultraliberalismo. Han logrado, por medio de la agresión y la ocupación militar, lo que en otras regiones están consiguiendo por vía de tratados regionales o de tratados bilaterales de libre comercio.

Es totalmente inaceptable que el Consejo de Seguridad avale el saqueo de Iraq, su reconversión al ultraliberalismo económico, la celebración de elecciones y el cambio de Constitución bajo la égida del ocupante extranjero, como lo ha hecho con las resoluciones 1483, 1511 y 1546.

La AAJ estima que dichas resoluciones, por un lado, y la resolución 1559, promovida por Estados Unidos y Francia, por el otro, aprobada con nueve votos a favor y seis abstenciones [1], que reclama el retiro de los 15.000 soldados sirios del Líbano 'a fin de que las elecciones presidenciales se realicen sin interferencias extranjeras', constituyen la prueba acabada de una total incoherencia en el manejo de los principios del derecho internacional y de una hipocresía sin límites por parte de algunas grandes potencias y de sus satélites.

Señor Presidente:

Esta Comisión debería formular recomendaciones para que se ponga fin a la persistente violación de los derechos humanos, entre ellos el derecho a la autodeterminación, en Haití y en Iraq, dos casos ejemplares de los desastres provocados por el colonialismo y el neocolonialismo.

Muchas gracias.

Nota:

[1]: Votaron a favor de la resolución 1559, además de Estados Unidos y Francia, Alemania, Angola, Benin, Chile, España, el Reino Unido y Rumania. Se abstuvieron Argelia, Brasil, China, Filipinas, Pakistán y Rusia, que consideraron que la resolución era contraria a la Carta de las Naciones Unidas por constituir una interferencia sin precedentes en los asuntos internos de un Estado miembro de la ONU, como afirmó el ministro de relaciones exteriores libanés durante el debate.