Utilización del Caso Tláhuac para prolongar la injusticia en el Caso Cerezo

 

Como es por todos sabido de acuerdo a las informaciones que han aparecido en los diversos medios de comunicación, hoy sabemos que la Secretaría de Seguridad Pública mintió sobre la misión que llevaban los agentes encubiertos de la PFP.

En un inicio intentó hacer creer a la opinión pública que agentes con un buen currículum de trabajo en vigilancia antiterrorista, estaban en el poblado de San Juan Ixtayopan, en un micro caso de narcomenudeo.

Pronto, gracias a la publicación de La Jornada del 27 de noviembre, se reveló que su verdadera misión tenía relación con los hermanos Alejandro, Héctor y Antonio Cerezo Contreras, presos injustamente desde hace tres años y cuatro meses en el Penal Federal de Alta Seguridad “La Palma”.

Ante esta revelación de la verdadera misión de los agentes de la PFP, el Estado a través de las plumas a su servicio intentó justificar una vinculación de narcoterrorismo, que resultó fallida, posteriormente a través de la pluma de Raymundo Riva Palacio, quien escudándose en “Información confiable y fuentes reservadas” inventa sin fundamento alguno que:

 

“Los agentes de inteligencia de la Policía Federal Preventiva (PFP) que fueron linchados la semana pasada en Tláhuac investigaban a la comandancia general del Ejército Popular Revolucionario (EPR), cuyo máximo dirigente, Francisco Cerezo Quiroz, presuntamente vivía en una casa adyacente al lugar donde se torturaron y quemaron vivos a dos policías, de acuerdo con información confiable. […] Información confidencial del gobierno mexicano establece que la anterior casa donde llegaban a refugiarse los comandantes del EPR era donde vivían los hijos del jefe eperrista, Antonio, Héctor y Alejandro Cerezo Contreras, en Xochimilco, quienes fueron detenidos en una operación gubernamental en agosto del 2001, tras una serie de petardazos en instalaciones bancarias reivindicadas por las FARP.”

 

Nuevamente el Estado miente, ahora intentando hacer creer a la opinión pública que el linchamiento, que se produjo como resultado de sus propias fallas y la negligencia criminal de los altos mandos de la PFP, tiene relación con grupos armados.

No sólo eso, sino que sin base alguna que pruebe estas mentiras, se intenta justificar la serie de detenciones y allanamientos en el poblado de San Juan Ixtayopan, pero también, y eso para nosotros como familiares de los hermanos Cerezo, el objetivo principal de esta campaña mediática que el Estado lanza a través de sus plumas y voces en los medios de comunicación es:

 

Justificar la permanencia de los hermanos Alejandro, Héctor y Antonio Cerezo Contreras y Pablo Alvarado Flores en el Penal de Alta Seguridad “La Palma”, negando el Amparo Directo interpuesto, ya hace 8 meses, por nuestra abogada Bárbara Zamora y que es de suponerse será otorgado en este mes de diciembre y así también justificar esta injusticia a través de informaciones no oficiales para seguir manteniendo en prisión hasta el año 2009, a los hermanos Cerezo.

 

Como es sabido, a los hermanos Cerezo se les exoneró de los delitos relacionados con los petardos de Banamex, en la apelación se les exoneró del delito de terrorismo y de posesión de cartuchos y son mantenidos en prisión con la acusación de Delincuencia Organizada, el juez que los sentenció a 7 años y medio dijo que aunque no hay pruebas suficientes para acusarlos de terrorismo y de la autoría de los petardos de Banamex del 08 de agosto de 2001, los hermanos Cerezo son parte de la delincuencia organizada, nosotros preguntamos, organizada para qué, con qué fin.

Si bien es cierto el indígena nahuatl Pablo Alvarado permanece en prisión sentenciado a cinco años con el único fin de poder mantener dicho delito, ya que de lo contrario tendrían que acusar de delincuencia organizada a tres hermanos, lo cual es equivalente a decir que toda familia es una organización criminal.

Nos preguntamos si es esta, la verdad legal y la verdad histórica, fabricada con base en mentiras y rumores infundados, de la cual habla el Procurador General de la República, Rafael Macedo de la Concha, responsable de la detención, tortura y encarcelamiento de los hermanos Cerezo Contreras y Pablo Alvarado

 

ATENTAMENTE

 

Rúbrica                                                                                  Rúbrica

Francisco Cerezo Contreras                                                   Emiliana Cerezo Contreras