Amparo a hermanos Cerezo, sin resolución tras medio año

Señora directora: Quisiéramos dar a conocer a la opinión pública el estado que guarda el caso de los hermanos Alejandro, Héctor y Antonio Cerezo Contreras, estudiantes universitarios, y Pablo Alvarado Flores, recluidos en el Cefereso 1, La Palma, Almoloya, sentenciados a siete años y medio de prisión.

Como es sabido, el amparo directo para lograr la tan anhelada libertad fue interpuesto por nuestra abogada Bárbara Zamora el 26 de abril de este año, sin que hasta hoy, medio año después, haya todavía una resolución.

El Estado mexicano ha logrado por medios supuestamente apegados a derecho mantener en prisión a mis hermanos, a pesar de haber sido exonerados de los delitos que originaron su detención; hoy, en este gobierno, ser hermanos es sinónimo de delincuencia organizada.

El objetivo de estas aberraciones jurídicas es mantener el mayor tiempo a mis hermanos en prisión. Nos preguntamos cuál es la razón de tanto encono, acaso utilizarlos como conejillos de Indias para que el doctor Carlos Tornero Díaz, comisionado de penales federales, escriba la tesis "Utilización de la siquiatría como herramienta de tortura" y por eso se han negado por más de dos años las diversas solicitudes de traslado a un penal del DF, o existe otra razón inconfesable que tiene relación con las preguntas insistentes del cuerpo de sicólogos del penal sobre si mis hermanos han tenido comunicación con sus padres.

Después de tres años de injusta prisión, mis hermanos tendrán que usar lentes; Alejandro tiene una lesión que por falta de atención médica adecuada tal vez amerite una intervención quirúrgica que le devuelva funcionalidad a la mano derecha.

El Estado ha utilizado al licenciado José Luis Santiago Vasconcelos, titular de la SIEDO, quien de forma absurda y sin fundamento alguno declara que mis hermanos tienen relación con los petardos que en Morelos hicieron explosión a principios de este año.

Gracias a la ética informativa de medios como el que usted dirige y la solidaridad de organizaciones y personas hemos logrado que este caso no sea olvidado, pero hoy, en un intento más por atemorizar y alejar el apoyo a esta búsqueda de justicia, el Estado acusa a nuestro Comité Cerezo de ser una "fachada del Ejército Popular Revolucionario"; nosotros contestamos que apegados a la Constitución sólo estamos ejerciendo nuestros derechos y no cejaremos en nuestro empeño por ver libres a nuestros hermanos, a pesar de las amenazas. Termino honrando la memoria de nuestra Digna Ochoa y Plácido, quien el pasado 19 de octubre cumplió tres años de haber sido "suicidada".

Francisco Cerezo Contreras

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