La Jornada

 México D.F. Domingo 21 de diciembre de 2003

 Correo Ilustrado

Quebequenses piden la liberación de "presos  políticos" en México

Señora directora: Una delegación de ciudadanos y ciudadanas quebequenses, preocupados por la grave situación que sufren nuestros hermanos mexicanos, respecto a la violación de los derechos humanos, y en especial con los hermanos Cerezo Contreras, Pablo Alvarado Flores y todos los presos políticos en México, hoy 17 de diciembre demostramos nuestro descontento ante la representación del gobierno mexicano. Llevamos una petición firmadas por 300 personas que se adjuntan a los cientos de firmas recabadas durante los últimos meses, dentro de la campaña por una ley de amnistía federal para la liberación de todos los presos políticos en México.

Queremos hacer presente nuestra solidaridad con nuestros hermanos, el trabajo que realizamos es sobre todo de sensibilizacion a la sociedad quebequense, por medio de conferencias, entrevistas para radio y publicaciones.

Nuestro interés es que el gobierno mexicano pague el costo político, desenmascarando el rostro represor del llamado "gobierno del cambio", porque cada vez más canadienses y quebequenses se dan cuenta de que en México se siguen violando los derechos humanos, como podemos constatarlo en los informes de Amnistía Internacional.

Los que suscribimos tenemos conocimiento de que a los hermanos Alejandro, Héctor y Antonio Cerezo Contreras, estudiantes de la UNAM, y a Pablo Alvarado Flores, indígena nahua, se les ha sometido a tratos crueles e inhumanos, violando así sus garantías individuales e imponiéndoles un proceso judicial amañado en el que fueron condenados a siete años seis meses, y cinco años a Pablo Alvarado.

Exigimos a las autoridades competentes de México su intervención para que a estos jóvenes universitarios, presos desde hace más de dos años en el penal de alta seguridad de La Palma, Almoloya de Juárez, se les traslade a un penal del Distrito Federal, donde puedan, con mayor facilidad, continuar con sus estudios universitarios, con la visita de sus profesores, familiares y amigos, en tanto se resuelve jurídicamente esta injusticia.

Exigimos de las más altas autoridades de la República castigo a los funcionarios responsables de la violación de sus derechos humanos, la revisión del caso de los hermanos Cerezo y Pablo Alvarado y su libertad inmediata e incondicional.

Solidariamente

Comité para la Liberación Incondicional de l@s Pres@s Polític@s, Montreal; Comité Cristiano por los Derechos Humanos en América Latina, Montreal. Sarah C. Faucher y Oscar Carrillo

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