La Central Nuclear de Almaraz

se convierten de inmediato en objetivos de primera magnitud ante cualquier amenaza militar, y en un imán para todo tipo de actos de extorsión.

Todo el entorno en el que ubican se ve directamente afectado por las consecuencias que podrían derivarse tanto de un desastre natural (seismos, por ejemplo) como, particularmente, de un acto deliberado de sabotaje o destrucción de carácter bélico o golpista. La guerra por el petróleo del Golfo Pérsico ha puesto en evidencia ha puesto en evidencia esa amenaza.

Cualquier forma centralizada y a gran escala de obtener energía comporta riesgos de esa especie, pero nunca en el grado de un desastre radiactivo. Con unos pocos kilogramos de plutonio es relativamente fácil construir una bomba nuclear de potencia equivalente a veinte o treinta mil toneladas de TNT.

 

Cerrar Almaraz

 

LARGA HISTORIA DE LOS INCIDENTES

EN ALMARAZ

La central nuclear de Almaraz I y II tiene en su haber un largo currículo de accidentes e irregularidades y paradas no programadas

Al iniciar el año 1985 se sabe qué aún había más fallos e irregularidades, que la dirección de la central había ocultado. Por esta ocultación se multa a la empresa con algo más de 4 millones de pesetas. A cambio en marzo, la empresa despide a un trabajador por filtrar información a la prensa. En mayo del mismo año hay que paralizar el grupo 2. La avería fue ocultada durante 24 horas. Y al mes siguiente, el grupo1 tuvo una fuga de vapor en el circuito secundario del primer reactor. Ante esos accidentes el Consejo de Seguridad Nuclear se pronuncia en la prensa diciendo que todos esos fallos son normales.

 

En Abril de año siguiente 1986, vuelve a pararse el grupo 1, por perdidas de agua radiactiva. La denuncia insistente de todo este caso le cuesta el cargo al Consejero de Obras públicas, Urbanismo y Medio Ambiente Don Juan Serna, que manifiesta que no puede seguir callando.

El 13 de Julio de 1988, en Almaraz I, tuvo lugar un serio accidente de fuga de agua radiactiva del circuito primario al secundario de 3,3 litros por minuto, que produjo emisiones radiactivas gaseosas al medio ambiente exterior. Este accidente fue debido a la rotura de los tubos de los generadores de vapor, cuya lamentable situación se vino agravando desde la puesta en marcha de la central y constituye, de nuevo el más grave problema en la actualidad.

 

En Enero de 1994 se produjo la parada del reactor de Almaraz II cuando un grupo de barras de control cayó accidentalmente en el curso de unos trabajos de reparación del sistema de control de las barras.

20 de Julio de 1995

  La explosión y el incendio de un transformador en la línea eléctrica conectada a Almaraz fue la principal incidencia registrada en la central nuclear Extremeña a lo largo del segundo semestre de 1995. Como consecuencia del incendio se produjo la desconexión de la barra 1 de la subestación de 400 kilovatios y de las líneas Morata I y II.

 

21 de Julio de 1995

  Se produjo una parada automática del reactor, originada por la explosión de un transformador de salida de grupo a la barra B-2 del parque de 400 KV.

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13 de Julio de 1996

Comenzaron los trabajos para introducir en el recinto de contención de la Unidad I de la Central , el primero de los tres generadores que se instalaron , de forma paralela a la sustitución de los viejos generadores. El mismo sábado, un fa

llo de medición de temperatura y el domingo la muerte de dos técnicos. Y levanta en iras a todo el pueblo y provoca la reacción de la mayoría de las organizaciones ecologistas del país.

 

19 de Agosto de 1996.

Una fuga de agua radioactiva del circuito primario al secundario de la unidad II de la C N A, pone otra vez en la picota la seguridad de esta planta atómica, la causa de este suceso, ha sido la rotura de tubos del generador de vapor 3 de la unidad II, creímos que es necesario que la opinión publica conociera la transcendencia de este suceso, que hay que catalogar como grave y que da la razón a los grupos ecologistas que desde 1983 vienen denunciando la extrema inseguridad de los generadores PWR fabricados por WESTINGHOSE. Las obras realizadas a sido con un coste superior a los 52.000 millones de pesetas.

  17 de enero de 1997.

El reiterado mal funcionamiento de las barras de control, prueba una vez más su preocupante falta de seguridad.

 

1 de Marzo de 1997.

  La central parara, durante los próximos dos meses, la unidad II, para repetir los trabajos que llevo a cabo el pasado verano, en la unidad I, para sustituir los generadores de vapor, la tapa de la vasija del reactor y los rotores de las turbinas, completando así un complejo proceso técnico que va a suponer una inversión que ronda los 500.000 millones de ptas.

 

    Según los informes semestrales del Consejo de Seguridad nuclear entre 1993 y 1998 de un total de 11 paradas no programadas en la unidad I y 6 en la unidad II, sin contar las importantes averías en 1999.

 

3 de noviembre de 1998

  APARECEN NUEVOS PROBLEMAS EN ALMARAZ COMO CONSECUENCIA DE LA OPERACIÓN EN CICLOS DE 18 MESES

Ecologistas en Acción -Extremadura y la Plataforma Antinuclear Cerrar Almaraz, denuncian los efectos negativos sobre los núcleos de los reactores de Almaraz (Cáceres) a grandes tensiones mecánicas y térmicas que se manifiestan en deformaciones de la geometría del núcleo. En esta ocasión se trata de los palpadores de las guías de las barras de control, que se muestran ineficaces para controlar la exacta posición de estas.

 

16 de Diciembre de 1998

Ecologistas en Acción y la Plataforma Antinuclear, denuncian la aparición de un grave suceso de contaminación química que se produjo en el grupo II de la Central Nuclear de Almaraz, cuando funcionaba el 34% de su potencia después de arrancar un día antes. El suceso consistió en la aparición de un elevado nivel de sulfatos y resinas en el lado secundario de los generadores de vapor. El valor de la concentración de sulfatos fue mil veces superior a los valores normales originándose así un ambiente altamente corrosivo.

  Estas deformaciones van a obligar a sustituir los palpadores de las guías de control ( son unas piezas que sirven para medir con precisión la posición de las barras de control). La posición de estas determina junto con otros elementos el ritmo de la reacción nuclear. Por tanto el conocimiento cabal de la posición de las barras de control es vital para la seguridad y el normal funcionamiento de la central. Estos hechos explican la necesidad de la sustitución de estas piezas a pesar del coste económico de la operación y de las dosis radiactivas que reciban los trabajadores que las realicen. El problema de fondo estriba en que todos los sistemas se diseñaron para trabajar en ciclos de 12 meses. El cambiar el combustible gastado cada 18 meses en lugar de cada 12 implica someter a tensiones térmicas y mecánicas al núcleo del reactor, lo cual provocó ya deformaciones en las barras de control y en los elementos combustibles y ahora obliga a cambiar los palpadores.

 

 

6 de Abril de 1999

Ecologistas en Acción y la Plataforma Antinuclear, supo que alrededor de las 11 de la mañana, en la central nuclear de Almaraz, había sonado un disparo o explosión en el reactor de la unidad II de la CN A y que este se había quedado desacoplado.

 

 5 de junio de 1999

  Ecologistas en Acción y la Plataforma Antinuclear, han denunciado la existencia de una importante Contaminación radiactiva en la central nuclear de Almaraz I (Cáceres). Las tareas de recarga han debido ser ralentizadas y los niveles de radiación en la contención y en algunos edificios auxiliares son anormalmente altos. La central nuclear de Almaraz I ha sufrido un importante suceso de contaminación del circuito primario que ha elevado los niveles radiactivos hasta valores muy superiores a los normales. El suceso sé produce después de que la planta hubiera funcionado casi 530 das en él presente ciclo de explotación.

 

12 Junio de 1999

  CONTINÚAN LOS PROBLEMAS

  Ecologistas en Acción Extremadura y la Plataforma Antinuclear, hacen público que siguen apareciendo problemas en la recarga de la Central Nuclear de Almaraz (Cáceres). Las dosis recibidas por algunos trabajadores son apreciablemente mayores que las previstas, se ha producido una fuga de agua de llenado de la contención y existen dudas sobre el comportamiento futuro de algunos elementos del primario.

Se denuncia que siguen complicándose las tareas de recarga de la central nuclear de Almaraz I como consecuencia de la rotura de una fuente neurótica secundaria que provocó fuga de material radiactivo que contaminó el primario. Ya se ha iniciado el levantamiento de la tapa de la vasija, con un retraso de más de una semana sobre las condiciones normales, que en este caso ha ido acompañada de una elevación del agua en la contención para intentar minimizar el impacto radiólogo. No obstante han aparecido nuevos problemas. Así se ha producido una fuga del agua que sirve para inundar la contención a través del recinto RC-18 de la unidad de sellado debido a la falta de estanqueidad de dichos sellos. Esto ha significado nuevas demoras en el proceso ya que es preciso evitar dicha fuga por lo que sé est procediendo a tapar con silicona. Según las últimas informaciones de que dispone Ecologistas en Acción la tapa de la vasija sigue suspendida.

  Por otro lado la carga radiológica de los trabajadores están siendo mayores de las previstas. A título de ejemplo los trabajadores que retiraron los pernios de la vasija han recibido cargas del orden de 6 milisievert cuando deberán haber quedado por debajo de 1, y los encargados de limpieza están en el orden de 1,1 milisievert que también es mayor que lo previsto.

  Además existen dudas razonables del comportamiento de algunos elementos del primario cuya química se ha visto severamente afectada durante este proceso y que pueden presentar en el futuro problemas de corrosión. A título de ejemplo están los codos de los tubos en U de los generadores de vapor en los que se han detentado niveles muy altos de contaminantes. Su comportamiento futuro es una incógnita.

Criticamos además el intento, no solo de los propietarios de la central sino de las autoridades nucleares responsables y de algún miembro del Gobierno de Extremadura, de minimizar el alcance de un suceso, que previamente habían ocultado, y cuyas consecuencias están aún por evaluar de forma completa.

25 de septiembre de 2002

 

ECOLOGISTAS EN ACCIÓN DEnuncia que el expediente sancionador abierto a la central NUCLEAR de almaraz revela, en realidad, GRAVES DEFICIENCIAS EN LA CENTRAL NUCLEAR DE ALMARAZ

 

Según ha podido saber ECOLOGISTAS EN ACCIÓN, el sistema de aguas esenciales de los dos reactores nucleares de Almaraz (Cáceres) está aquejado de serias deficiencias y podría dar problemas en las épocas calurosas del año. Las informaciones que maneja ECOLOGISTAS EN ACCIÓN revelan que el expediente sancionador no es una mera falta administrativa, como podrá pensarse, sino una omisión consciente de unos hechos graves que hubieran obligado a la parada preventiva de la central y las consiguientes perdidas económicas

Los problemas detectados se refieren a algunos sistemas vitales para la seguridad de la central, como las bombas de inyección de seguridad o las bombas del rociado de las cúpulas de las centrales, que deberían suministrar agua justo en caso de accidente severo y están ubicados en una sala que se refrigera justamente por el agua del embalse de Arrocampo. El correcto funcionamiento de estos equipos vitales para la seguridad depende de la temperatura de la sala donde están situados. Esta sala se refrigera justamente por el agua que se toma del embalse. Como se sabe, los dos reactores de agua a presión de 973 y 982 MW de potencia de la central nuclear de Almaraz, para evacuar el calor desprendido (que supone unos 4000 MW), se refrigeran por circuito abierto al embalse de Arrocampo. Este embalse ha registrado en varias ocasiones elevadas temperaturas que han motivado la aparición de aves y peces muertos (por ejemplo en verano de 2000). Estos sucesos se deben al aumento de la temperatura ambiente que se produce en verano y al enorme calor desprendido por los dos reactores.

La temperatura máxima admitida hasta febrero de 1999 en la zona del embalse de donde toma agua Almaraz, de 37 grados, es demasiado elevada para permitir la vida de muchas especies, pero es que además se ha demostrado que es demasiado elevada para refrigerar la sala donde se encuentran los citados equipos de salvaguardia. La temperatura máxima admisible para que la refrigeración funcione aceptablemente es de 30 grados, que se superan frecuentemente en verano.

Este problema fue descubierto por los técnicos de la central en febrero de 1999. En esa fechas debería haberse comunicado al Consejo de Seguridad Nuclear (CSN). Sin embargo los técnicos proceden a la realización de pruebas el 15 de septiembre que , de nuevo, no dejaban lugar a dudas sobre el incumplimiento. Y no es hasta el 12 de noviembre cuando los explotadores comunican al CSN esta grave deficiencia. Los motivos de estos retrasos son claros para Ecologistas en Acción: la superación de las temperaturas en verano debería haber conducido a la parada de la central, con las consiguientes pérdidas económicas para los explotadores. Esos incumplimientos motivaron la imposición de dos multas de 40 y 50 millones de pesetas (204.404 y 300.506 €) el 26 de marzo de 2001. Cantidades ridículas si tenemos en cuenta que ambos reactores facturan al día unos 400 millones de pesetas (2,4 millones de €).

La solución propuesta por la central fue el tomar agua de todo el embalse en lugar de una zona limitada, como se producía en aquellas fechas. Sin embargo, el proceso de construcción del embalse no garantiza su resistencia a los terremotos de la zona, por lo que el CSN le ha exigido medidas adicionales, sin las cuales no se puede garantizar cabalmente la seguridad de la central, quebrándose así el precepto de defensa en profundidad. En el día de hoy, cuando nos encontramos con que estas medidas siguen sin estar operativas.

Ecologistas en Acción quiere denunciar la tremenda irresponsabilidad de la central ocultando un hecho grave para evitar perdidas económicas lo que revela la ya precaria fiabilidad de las informaciones facilitadas por los explotadores de esta. Asimismo pide la parada preventiva de las dos centrales en el momento en que suban las temperaturas y denuncian la pasividad del CSN ante los incumplimientos de Almaraz. No se comprende como el CSN, que sancionó a los explotadores de la central por estas deficiencias, sin embargo permite que la planta siga funcionando en estas condiciones en la actualidad.

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Nuevos problemas en la central nuclear

de Almaraz

Ecologistas en Acción de Extremadura y la Plataforma Antinuclear ha dado a conocer que el reactor número 2 de la central nuclear de Almaraz (Cáceres) sufrió una parada no programada el 28 de enero de 2003 por fallo en uno de los aparatos de medida, vitales para la seguridad de la central. En la puesta en marcha de la central se produjo un nuevo incidente que obligó a parar de nuevo la central..

El día 28 de enero de 2003 la unidad número 2 de la central nuclear de Almaraz sufrió un fallo que obligó a parar la central. Según Ecologistas en Acción y la Plataforma antinuclear, el fallo consistió en la avería de la cámara de detección de neutrones, un aparato que, junto a otros, sirve para controlar el ritmo de la reacción nuclear. Dicho aparato es imprescindible para el funcionamiento normal de la central, pues permite regular el ritmo de la reacción y, por tanto la potencia generada. El balance de neutrones es clave para mantener bajo control la reacción nuclear y evitar accidentes severos. La gravedad del fallo aconsejó proceder a la parada no programada del reactor. Tras la reparación, que duró un día, se decidió conectar de nuevo la central a la red eléctrica el 29 de enero a las 12:00 horas. La reparación supuso que los trabajadores tuvieran que entrar en la zona de la contención y recibir dosis radiactivas.

En el proceso de puesta en marcha se produjo una avería en una de las bombas de refrigeración del reactor. En concreto se observó una vibración anómala de uno de los cojinetes. Las bombas de refrigeración son otros elementos vitales para la seguridad, pues mantienen el flujo de refrigerante a través del reactor, lo que permite la extracción del calor producido en la reacción nuclear y evita un descontrol de la reacción.

Este hecho obligó nuevamente a parar la central y a proceder a nuevas reparaciones. Éstas consistieron en la sustitución de la bomba por una de repuesto. Las condiciones en que se encuentra esta segunda bomba son una incógnita puesto que no ha estado sometida a los controles necesarios.

Los problemas citados se unen a los que ya tenía la central, mermando sus condiciones de seguridad. Uno de ellos, el fallo de la bomba, incide además en el principal punto flaco de la nuclear de Almaraz, la insuficiencia de sus sistemas de refrigeración y de aguas esenciales. Ecologistas en Acción considera que la central es un verdadero peligro para la población y que debería cerrarse.

5 de mayo de 2003

SE INCENDIA UN GENERADOR DIESEL DE EMERGENCIA EN LA CENTRAL NUCLEAR DE ALMARAZ

Ecologistas en Acción denuncia un nuevo incidente en la central nuclear de Almaraz (Cáceres) que consistió en un incendio en un generador diesel de emergencia durante las pruebas que se realizaron en el proceso de recarga de la central. Los generadores de emergencia son sistemas fundamentales para la seguridad de la central, por lo que se trata de un incidente grave.

El sábado día 3 de mayo, durante el proceso de recarga de combustible de la central de Almaraz, se procedió a poner en marcha los generadores diesel de emergencia para comprobar su estado. Durante este proceso, el generador número 4 tuvo serios problemas que desembocaron en un incendio que finalmente pudo ser controlado. Las reparaciones, imprescindibles antes de la puesta en marcha de la central, pueden alargar el tiempo de parada entre seis y siete días.

Para Ecologistas en Acción se trata de un grave incidente por varios motivos. El primero es que los generadores diesel de emergencia constituyen un sistema vital para la seguridad de la central. En caso de accidente, son estos sistemas los encargados de producir la electricidad para que los sistemas de emergencia de la central como las barras de control o las bombas de extracción de calor, puedan funcionar. Si se hubiera producido un accidente en la central que hubiera precisado el encendido del generador número 4, éste habría sufrido un incendio, lo que habría agravado el accidente y lo que es más importante, los sistemas de seguridad podrían haberse quedado sin alimentación eléctrica dejando a los operadores sin capacidad para actuar ante el hipotético accidente.

El segundo motivo es que este incendio viene a revelar que las operaciones rutinarias de mantenimiento que se realizan sobre los generadores diesel son francamente deficientes, lo cual es gravísimo porque, como se ha dicho antes, son sistemas claves para garantizar la seguridad de la central. Ecologistas en Acción quiere denunciar estas prácticas que revelan una muy deficiente cultura de seguridad de los responsables de la central y se pregunta: si el mantenimiento de estos sistemas claves es así de malo, ¿cómo será el del resto de los dispositivos de la central?

El incidente que se acaba de producir viene a sumarse al denunciado recientemente por esta asociación, que se produjo en una de las bombas de refrigeración. Ecologistas en Acción recuerda, además, que siguen sin subsanarse las deficiencias del sistema de refrigeración esencial, que motivó una sanción de 90 millones de pesetas en el año 2001. Teniendo en cuenta la degradación de la seguridad que esto supone, lo más sensato sería proceder al cierre de ésta y de todas las centrales nucleares.

Atención: SOCIEDAD 3 de junio de 2003

EL CSN SE PLIEGA A LOS DESIGNIOS DE ALMARAZ Y AUTORIZA SU PUESTA EN MARCHA SIN REPARAR EL GENERADOR QUEMADO

Ecologistas en Acción ha acusado al Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) de sumisión frente a los deseos de los explotadores de la central nuclear de Almaraz (Cáceres), por aceptar la puesta en marcha sin reparar el generador diesel que sufrió un incendio el pasado 3 de mayo.

El día 25 de mayo, el CSN decidió eximir a los explotadores de la central nuclear de Almaraz del cumplimiento de una de sus Especificaciones Técnicas de Funcionamiento y autorizar la puesta en marcha de la central sin haber reparado totalmente el generador diesel de emergencia número 4, que sufrió un incendio el día 3 de mayo pasado. A cambio, el CSN autorizó el plan de la central de sustituir el generador quemado por un sistema de seis generadores más pequeños que el original. Ecologistas en Acción critica esta medida que se toma, exclusivamente, para poder poner en funcionamiento la central lo antes posible, sin aguardar a las largas reparaciones necesarias en el generador incendiado.

Como ya reveló esta asociación ecologista, el generador que se incendió no estará reparado antes de mediados o finales de julio y estos trabajos se realizarán en Francia. Los explotadores de la central y el CSN han considerado que era un tiempo demasiado largo sin vender kilowatios-hora a la red y han decido adoptar una medida que permitirá que la central funcione con su seguridad degradada. Las causas más probables del incendió hay que buscarlas en las malas operaciones de mantenimiento realizadas por los explotadores de la central y permitidas por el CSN, por lo que esta decisión está en línea con la excesiva permisividad de este organismo hacia las instalaciones nucleares.

A pesar de lo afirmado por el CSN, el sistema de generadores que viene a sustituir al generador original no dota a la central del mismo nivel de seguridad que tenía antes del incendio. La prueba de que este organismo no confía plenamente en la seguridad de la solución adoptada es que, además de la sustitución, el CSN ha arbitrado una serie de medidas para que no se realicen operaciones de mantenimiento en las líneas de alta tensión que conectan la central con la red, para que se pongan en marcha todas las centrales hidroeléctricas cercanas a Almaraz y, dentro de la central, la organización de turnos especiales de vigilancia. Estos hechos muestran, en opinión de Ecologistas en Acción, que la sustitución del generador diesel es una chapuza que no garantiza plenamente la seguridad de la central y que, por lo tanto, es necesario apuntalar el funcionamiento de ésta mediante una serie de medidas externas.

El problema del generador diesel ha venido a sumarse al defecto, ya endémico, del sistema de refrigeración de la central, que ha demostrado ser insuficiente en verano y que sigue sin estar reparado. Para Ecologistas en Acción, lo más sensato sería proceder al cierre de la central, pero si no hace así, al menos debería obligarse a sus explotadores a hacerla funcionar con todos sus sistemas de seguridad al cien por cien.

Irregularidades en la central nuclear de Almaraz

EXTREMADURA 14/12/2004

Desde Ecologistas en Acción y la Plataforma Antinuclear solicitan a la Junta de Extremadura, al gobierno y a la Fiscalía, que investiguen los hechos muy graves que se han hecho públicos gracias a dos programas en Telecinco y que están creando preocupación por la seguridad y los posibles efectos negativos en la salud de los extremeños que pueden estar provocando las emisiones radioactivas de la Central Nuclear de Almaraz.

Entre otras posibles situaciones irregulares reveladas estarían las de algunos trabajadores en las recargas periódicas de combustible. Solicitan que por parte de inspección de trabajo se revisen los sueldos y las dosis radioactivas que reciben. Denuncian que la Central Nuclear oculta las elevadas dosis diarias que reciben quienes entran en las zonas con más radioactividad diluyéndolos entre la totalidad de los trabajadores, dando los datos de radiación del conjunto de la plantilla, incluyendo los de las oficinas, sin especificar aquellos que reciben grandes dosis.

Estos hechos se encubrirían con la utilización del dato de los milisivert/año recibiendo algunos trabajadores dosis próximas al máximo anual en pocos días. Consideran los ecologistas que el CSN puede ser cómplice de estas prácticas muy peligrosas para la salud de los trabajadores. Califican de poco creíble la afirmación del director de la central de que no se paga más a los trabajadores que reciben dosis altas en las recargas, piden que desde la Junta de Extremadura se investigue y haga público si esto es falso o si se están justificando las primas como dietas, horas extras u otros conceptos no legales o son pagadas con dinero negro.

Consideran inaudito que todavía no se haya realizado un estudio epidemiológico independiente de los efectos que sobre las personas del entorno pudieron tener, por ejemplo, los accidentes del 13 de Junio de 1988, en que hubo una importante liberación de sustancias radioactivas, de las que ni siquiera se alertó a la población y que debió ser motivo de clausura, o del acaecido el 26 de Mayo de 1999 entre otros muchos, así como del efecto sobre la salud de la continua emisión de radioactividad que realiza la central nuclear, y que, según se desprende del programa, se podría encontrar por encima de los niveles máximos legalmente admitidos en la actualidad.

Piden se hagan más fácilmente accesibles los datos de radioactividad de la zona a los ciudadanos, se realice un estudio independiente, en tiempo real, sobre las emisiones de la central nuclear al entorno y se compruebe si los datos que actualmente facilita la central, el CSN o la universidad (alguno de sus departamentos como el de Física han recibido importantes subvenciones de la CNA) coinciden, son ciertos o están falseados.

Para Ecologistas en Acción resultan escandalosos los supuestos pagos y/o regalos que por parte de la central podrían haberse realizado a algunos políticos de la zona, como afirmó el alcalde de Saucedilla, exigen se investiguen estos hechos por parte de la fiscalía en los pueblos del entorno más cercano para clarificar si son ciertos, ya que serían muy graves.

En el mismo sentido piden que se esclarezca por qué muchos políticos de la comarca, la mayoría de los alcaldes y muchos concejales, son al mismo tiempo trabajadores de la central. Consideran muy difícil que algunos políticos no antepongan sus intereses económicos personales al interés general y la salud de sus ciudadanos y opinan que muchos de ellos parecen servir más a los intereses de la central, defendiendo continuamente su supuesta inocuidad.

Piden explicaciones sobre el poco interés de la mayoría de estos alcaldes por impedir los expedientes de regulación de empleo que la central nuclear está llevando a cabo en los últimos años, y su falta de preocupación por la merma de seguridad que está provocando la importante disminución de personal, como indicarían las múltiples paradas no programadas y accidentes que viene sufriendo la planta nuclear que sobrepasa ya los 20 años y, sin embargo, ha visto reducidos sus empleados a menos de la mitad en 10 años. Por otra parte piden se aclare la cantidad de dinero que la central invierte en las fiestas populares de los pueblos del entorno.

Según los ecologistas, estos programas están revelando a la opinión pública las escandalosas deficiencias del Plan de Emergencia ante un accidente nuclear, y lo consideran absolutamente inoperante. En este sentido también creen imprescindible que se obligue a las centrales Nucleares a suscribir un seguro de responsabilidad civil ilimitada.

Ante todo ello exigen se anule el actual permiso de funcionamiento que estaría vigente hasta el 2010, en base a las múltiples irregularidades y a la amenaza que supone para la salud, procediendo a cerrar la central de inmediato, tal y como desean la mayoría de los extremeños.

2005

ECOLOGISTAS EN ACCIÓN Y LA PLATAFORMA ANTINUCLEAR CERRAR ALMARAZ DEnuncia que el expediente sancionador abierto a la central NUCLEAR de almaraz revela, en realidad, GRAVES DEFICIENCIAS EN LA CENTRAL NUCLEAR DE ALMARAZ

Según ha podido saber el sistema de aguas esenciales de los dos reactores nucleares de Almaraz (Cáceres) está aquejado de serias deficiencias y podría dar problemas en las épocas calurosas del año. Las informaciones que maneja ECOLOGISTAS EN ACCIÓN revelan que el expediente sancionador no es una mera falta administrativa, como podrá pensarse, sino una omisión consciente de unos hechos graves que hubieran obligado a la parada preventiva de la central y las consiguientes perdidas económicas

Los problemas detectados se refieren a algunos sistemas vitales para la seguridad de la central, como las bombas de inyección de seguridad o las bombas del rociado de las cúpulas de las centrales, que deberían suministrar agua justo en caso de accidente severo y están ubicados en una sala que se refrigera justamente por el agua del embalse de Arrocampo. El correcto funcionamiento de estos equipos vitales para la seguridad depende de la temperatura de la sala donde están situados. Esta sala se refrigera justamente por el agua que se toma del embalse. Como se sabe, los dos reactores de agua a presión de 973 y 982 MW de potencia de la central nuclear de Almaraz, para evacuar el calor desprendido (que supone unos 4000 MW), se refrigeran por circuito abierto al embalse de Arrocampo. Este embalse ha registrado en varias ocasiones elevadas temperaturas que han motivado la aparición de aves y peces muertos (por ejemplo en verano de 2000). Estos sucesos se deben al aumento de la temperatura ambiente que se produce en verano y al enorme calor desprendido por los dos reactores.

La temperatura máxima admitida hasta febrero de 1999 en la zona del embalse de donde toma agua Almaraz, de 37 grados, es demasiado elevada para permitir la vida de muchas especies, pero es que además se ha demostrado que es demasiado elevada para refrigerar la sala donde se encuentran los citados equipos de salvaguardia. La temperatura máxima admisible para que la refrigeración funcione aceptablemente es de 30 grados, que se superan frecuentemente en verano.

Este problema fue descubierto por los técnicos de la central en febrero de 1999. En esa fechas debería haberse comunicado al Consejo de Seguridad Nuclear (CSN). Sin embargo los técnicos proceden a la realización de pruebas el 15 de septiembre que , de nuevo, no dejaban lugar a dudas sobre el incumplimiento. Y no es hasta el 12 de noviembre cuando los explotadores comunican al CSN esta grave deficiencia. Los motivos de estos retrasos son claros para Ecologistas en Acción: la superación de las temperaturas en verano debería haber conducido a la parada de la central, con las consiguientes pérdidas económicas para los explotadores. Esos incumplimientos motivaron la imposición de dos multas de 40 y 50 millones de pesetas (204.404 y 300.506 €) el 26 de marzo de 2001. Cantidades ridículas si tenemos en cuenta que ambos reactores facturan al día unos 400 millones de pesetas (2,4 millones de €).

La solución propuesta por la central fue el tomar agua de todo el embalse en lugar de una zona limitada, como se producía en aquellas fechas. Sin embargo, el proceso de construcción del embalse no garantiza su resistencia a los terremotos de la zona, por lo que el CSN le ha exigido medidas adicionales, sin las cuales no se puede garantizar cabalmente la seguridad de la central, quebrándose así el precepto de defensa en profundidad. En el día de hoy, cuando nos encontramos con que estas medidas siguen sin estar operativas.

Ecologistas en Acción y La Plataforma Antinuclear Cerrar Almaraz quiere denunciar la tremenda irresponsabilidad de la central ocultando un hecho grave para evitar perdidas económicas lo que revela la ya precaria fiabilidad de las informaciones facilitadas por los explotadores de esta. Asimismo pide la parada preventiva de las dos centrales en el momento en que suban las temperaturas y denuncian la pasividad del CSN ante los incumplimientos de Almaraz. No se comprende como el CSN, que sancionó a los explotadores de la central por estas deficiencias, sin embargo permite que la planta siga funcionando en estas condiciones en la actualidad.

ECOLOGISTAS EN ACCIÓN DENUNCIA LA LAMENTABLE SITUACIÓN DE LA CENTRAL NUCLEAR DE ALMARAZ

La central nuclear de Almaraz ha sufrido dos nuevos incidentes que se suman a los problemas de que está aquejada dicha planta. El día 30 de junio, durante las pruebas de puesta en marcha del nuevo generador diesel que venía a sustituir al incendiado el día 3 de mayo, se produjo un nuevo incendio en un transformador asociado a éste generador. El incendio obligó a venir urgentemente a los técnicos franceses que realizaron la instalación. Estos fallos reiterados en el sistema eléctrico de la central no son sino un síntoma de las muy deficientes operaciones de mantenimiento que se está nrealizando. La degradación de las operaciones de mantenimiento se hace exclusivamente para reducir costes e incrementar los beneficios. Como es patente, la industria nuclear española no tiene ningún problema en cambiar seguridad por dinero. La reducción de plantilla mediante la jubilación anticipada de más de 100 trabajadores incidiría en la misma línea. Este incidente no ha sido dado a conocer por el CSN, por lo que Ecologistas en
Acción y La Plataforma Antinuclear Cerrar Almaraz va a pedir explicaciones a este organismo que, una vez más, ha ocultado información.

Por otra parte, y según ha hecho público el propio CSN, el día 2 de julio se produjo una fuga de agua con la planta ya a plena potencia en uno de los condensadores, que son los sistemas donde se condensa el vapor del circuito secundario. En estos sistemas el agua está a elevadas presión y temperatura por lo que la fuga supuso el escape de gran cantidad de agua.
Afortunadamente no había ningún trabajador en las proximidades, si no habría resultado gravemente herido por el agua caliente. La cantidad de agua que salió fue tan grande que provocó un cortocircuito en una bomba, lo que a su vez provocó una parada no programada de la central. El CSN asegura en un comunicado que "todos los sistemas funcionaron según el diseño de la planta". Y en su nota nada se dice del incendio previo del transformador ni de por qué no realizaron las revisiones pertinentes de las válvulas durante la parada.

Para Ecologistas en Acción y La Plataforma Antinuclear Cerrar Almaraz este cúmulo de incidentes no puede ser considerado una coincidencia y se debe achacar a las malas condiciones en que se encuentra la central. Estas condiciones se deben a unas deficientes operaciones de mantenimiento y a la ausencia de revisiones sistemáticas de algunos componentes fundamentales de la central, lo cual denota una muy mala cultura de seguridad de los explotadores de la planta que sólo buscan aumentar sus benéficos. Además muestra una dejadez, cuando no connivencia, manifiesta del CSN que es in capaz de imponer una cultura de seguridad a los explotadores de la central. En estas condiciones lo más sensato sería proceder a al cierre de la planta.

 

Nuevo fallo en la central nuclear de Almaraz

Ecologistas en Acción

Ecologistas en Acción denuncia un Nuevo fallo en la central nuclear de Almaraz I (Cáceres). Se trata esta vez de una de las dos turbobombas que mueven el agua en el circuito secundario de los generadores de vapor. Este fallo hizo parar la central ayer por la mañana y se suma a los otros problemas que tiene la central, que aumentan su inseguridad.

En el día de ayer, 31 de enero de 2006, a las 7:30 de la mañana se produjo una parada no programada de la central nuclear de Almaraz I (Cáceres) debido al fallo de una de las bombas que mueven el agua en el circuito secundario. La bomba se reparó durante el día de ayer y es posible que hoy la central vuelva a entrar en funcionamiento.

 

Se trata de una central de agua presurizada que genera electricidad mediante generadores de vapor. El calor generado por las reacciones nucleares se extrae mediante un circuito de refrigeración primario que lo cede en los generadores de vapor. El agua que entra en ellos y se convierte en vapor se mueve mediante dos turbobombas que mantienen el flujo apropiado para extraer el calor del generador que, a su vez, se ha extraído del núcleo de la central. El mantener este flujo de agua es, por tanto, básico para la seguridad de la central.

 

El fallo de una de las bombas que mantienen el flujo de agua es un problema que obliga a parar la central y a actuar a los sistemas de seguridad. Las bombas que hacen recircular el agua deben ser sometidas a minuciosas inspecciones y a procesos de mantenimiento apropiados durante las paradas para recarga de combustible para evitar este tipo de sucesos. En la central de Almaraz no es éste el primer incidente que hay que achacar a un mal mantenimiento. El fallo en 2003 del motor generador cabe también atribuirlo a las malas operaciones de mantenimiento. Es una forma que tiene los explotadores de centrales nucleares de ahorrar dinero que, a la postre, tiene efectos muy negativos sobre la seguridad. De esta forma se han ido acumulando los problemas de la central, lo hace que Ecologistas en Acción reitere la petición de cierre de Almaraz.

 

Por otra parte, Ecologistas en Acción solicita que se elabore un calendario de cierre programado de las centrales nucleares españolas y, en tanto éste se pone en práctica, se realice una vigilancia cercana de los procedimientos de inspección y mantenimiento para mantener la seguridad dentro de niveles razonables.

 

2006

Denuncian el mal estado de las pantallas de separación térmicas de lapresa de Arrocampo que refrigera la Central Nuclear de Almaraz.

Ecologistas en Acción y la Plataforma Antinuclear ha constatado el creciente deterioro de las pantallas de separación térmica del embal-se que refrigeran la Central Nuclear de Almaraz. Estas pantallas están sufriendo procesos de corrosión, habiendo cedido como es fácil-mente observable desde el muro de la presa.

Este deterioro provoca una menor eficiencia en la refrigeración de la central nuclear, proceso imprescindible para garantizar su seguridad.

El supuesto objetivo de estas pantallas, que son muros de hormigón, era evitar la mezcla aguas calientes procedentes de la refrigeración de los reactores nucleares con el agua que se bombea del Tajo para refrigerarla y reponer tanto la que se pierde por evaporación como la que se expulsa por los aliviaderos que van a parar al Tajo aguas abajo de las tomas.

Los ecologistas temen que se haga un nuevo parcheado como es habitual por parte de la central, cuando la medida que consideran más lógica sería proceder a su cierre inmediato, ante la amenaza que supone para la salud pública esta central nuclear.

2006
Alertan del riesgo de sobrecalentamiento en la Central Nuclear de Almaraz

 La central nuclear de Almaraz viene arrastrando problemas en la refrigeración de las aguas esenciales, aspecto imprescindible para garantizar su seguridad. Estos problemas y especialmente la irresponsabilidad de los propietarios de la planta nuclear conllevaron una sanción por parte del CSN, que los ecologistas calificaron en su día de insuficiente y ridícula en proporción a los enormes beneficios que obtienen sus explotadores forzando la producción. 

Ante esta sanción, la CN de Almaraz realizó unos cambios en su diseño para lo que instalaron unos aspersores que supuestamente iban a solucionar este problema. Sin embargo, según ha comprobado Ecologistas en Acción esta solución no debe de ser efectiva, a la vista del hecho fácilmente observable de las grandes cantidades de agua a alta temperatura que desde la presa de Arrocampo se están vertiendo al río Tajo en las últimas semanas, llegando actualmente en muchos días al límite de su capacidad de evacuación. Pese a que aún no se ha llegado a las máximas temperatura previsibles de este verano.

 En este sentido, recuerdan que en el verano del 95 hubo de parar el funcionamiento de la central nuclear al alcanzarse una temperatura ambiental de 40º. Pese a esos graves problemas de refrigeración de la Central Nuclear de Almaraz, desde el CSN se le permitió aumen-tar su potencia, a más del 105%.

 Para Ecologistas en Acción las empresas propietarias,  de las que Iberdrola es la mayoritaria, anteponen sus propios intereses económicos a la seguridad de todos y al respeto del medio ambiente.

Asimismo, denuncian que el gran volumen de agua caliente que la central nuclear vierte al Tajo está provocando un importante impacto ambiental, Provocando la proliferación de determinadas especies de algas verdes -claramente apreciables en el color de sus aguas-, e incrementando los procesos de eutrofización, que disminuyen la concentración de oxígeno en el agua afectando negativamente a la fauna del río Tajo, a las mismas puertas del Parque Natural de Monfragüe.

Los ecologistas consideran que estos hechos (el agua verde eutrofizada del Tajo) ponen de manifiesto que el concepto de "verde",  que tanto venden la central nuclear de Almaraz e Iberdrola, no es más que una siniestra burla.

Desde Ecologistas en Acción piden a la Junta de Extremadura y la Confederación Hidrográfica del Tajo que se tomen de inmediato medidas para evitar este grave perjuicio ambiental que está afectando al Parque Natural de Monfragüe.

Además vuelven a reiterar su petición de cierre inmediato de la Central Nuclear, sin esperar a Junio de 2010 como prometió el PSOE en la pasada campaña electoral.

.En la C N A..no hay seguridad de que funcione adecuadamente el sistema de emergencia más importante de una central nuclear, el encargado de refrigerar su corazón de uranio (llamado núcleo del reactor, donde se encuentra el combustible nuclear). Si, en caso de accidente, este sistema no funcionara podría producirse en la central nuclear de Almaraz una catástrofe similar a la que se produjo en Chernobyl (Ucrania, 1986), cuando se produjo la 'fusión del núcleo'. .

27 DE JUNIO

 

TODAVÍA SIN ACLARAR LAS CAUSAS DE LA AVERÍA DE LA CENTRAL NUCLEAR DE ALMARAZ II

LA PLANTA SIGUE PARADA MIENTRAS SE SIGUEN INVESTIGANDO LAS CAUSAS DEL FALLO.

Desde el día 27 de junio, la central nuclear Almaraz II (Cáceres) se encuentra parada por detectarse un problema en el condensador de vapor que se atribuyó a una avería en una bomba de vacío. Sin embargo, durante las tareas de inspección no se ha detectado ningún problema en la bomba y se sigue investigando sobre las causas del problema con la presión del tiempo.

Ecologistas en Acción quiere denunciar la acumulación de problemas en la central nuclear de Almaraz (Cáceres). En esta ocasión se han detectado problemas en el condensador de vapor que se atribuyeron a la bomba de vacío de dicho condensador, pieza que sirve para que el vapor se transforme en agua tras haber pasado por la turbina. El buen funcionamiento de esta pieza es clave para la normal explotación de la central puesto que el agua procedente del condensador ha de volver al generador de vapor y extraer del circuito primario el calor que procede del núcleo de la central. El incorrecto funcionamiento de este sistema obliga a parar la central el pasado 27 de junio porque, de seguir con esta deficiencia, no se podría extraer el calor del núcleo del reactor.

Durante todo este tiempo en que la plana ha permanecido parada, se ha inspeccionado a fondo la bomba supuestamente averiada sin que se halle ninguna causa que pueda justificar la bajada de nivel del caudal de la bomba. Los propietarios de la central están prosiguiendo con las inspecciones de todos los sistemas anejos al condensador para averiguar la causa del fallo detectado sin que, por el momento, se haya encontrado pista alguna de lo sucedido. Los propietarios de la planta están nerviosos por encontrarse sometidos a una doble presión. Por un lado la pérdida de ingresos debido a la no producción de electricidad y, por otro, cuando la central supera los 20 días de parada el Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) obliga a los operadores de la central a extraer las barras de combustible. Si finalmente se vieran obligados a sacar el combustible del núcleo, significaría un exceso de complicaciones para ellos.

Ecologistas en Acción piensa que lo mejor es programar ya el cierre de esta central que acumula más y más problemas de funcionamiento. Pero, en todo caso, nunca se debería poner en de nuevo en funcionamiento la central sin haber averiguado las causas de las averías del condensador. De otra forma se corre el riesgo de que se repitan los incidentes que se han registrado y que el suceso pase a mayores.

 

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