Hacia un Foro Social Trasatlántico
Cuanto más grande sea la realidad del poder imperialista, menos se discutirá. Dejará de ser cuestionado, hasta el punto, incluso, que ni siquiera merecerá una mención. ¿Cómo llamar al dominio, control, posesión y explotación, por parte de las clases dominantes de determinados estados -naciones, sobre otros estados-naciones, sus recursos, sus mercados y su población?

Hoy en día, las corporaciones multinacionales y las demás instituciones financieras de euro-américa controlan, hasta un nivel sin precedentes, la mayoría de las instituciones económicas mas importantes. Instituciones que producen, invierten, intercambian y circulan el capital y los demás bienes a nivel mundial. No son corporaciones sin estado. Sus sedes centrales están en los EEUU y la UE. Los gobiernos de estros Estados negocian, manipulan, ejercen presiones y hacen guerras para crear oportunidades, acaparar a los competidores, romper las barreras a su expansión económica y eliminar a cualquier tipo de enemigo, ya sea real o imaginario.

James Petras

Desde los diferentes colectivos que trabajan en solidaridad con las luchas de los pueblos de América Latina queremos plantear una respuesta política y social a la Cumbre de Jefes de Estado de Unión Europea y América Latina y Caribe que tendrá lugar en el marco de la presidencia de la Unión Europea del Gobierno Español en mayo de 2002. En este tipo de cumbres de jefes de estado se plantean políticas que transforman las condiciones de vida de las mayorías sociales sin que estas si quiera sean tenidas en cuenta. La voz de los pueblos es desestimada y los profesionales de la política malvenden las riquezas de sus pueblos condenando su futuro.

El actual marco de relaciones en el que se produce la denominada globalización en América Latina está determinado por la dominación que ejerce EEUU. EEUU ha considerado históricamente América Latina como su patio trasero. La fuerte dependencia de economías y gobiernos amputa la soberanía de la mayoría de los pueblos de América Latina. En plena guerra fría, para fortalecer el control de las riquezas y justificándose en la lucha contra el marxismo, promovió cruentos golpes militares y dictaduras que exterminaron físicamente o condenaron al exilio a la disidencia política. El origen de las actuales democracias formales está en esos regímenes violentos y autoritarios. Las transiciones de la dictaduras formales a las del mercado no han modificado la estructura social, mas bien la han reforzado. EEUU desde la tristemente celebre Escuela de las Américas concienció a los militares de todo el continente en la Doctrina de la Seguridad Nacional que convertía a la disidencia interna en el "enemigo interior" a exterminar. La desclasificación de la documentación de la CIA está sirviendo para conocer la implicación de las agencias norteamericanas en la puesta en marcha del Plan Cóndor, autentica internacional del terrorismo de estado que coordinó la represión de las dictaduras del cono sur.

Los pueblos de Centroamérica también sufren los efectos de la influencia de los EEUU que militarizó la zona, invirtiendo miles de millones de dólares en armas y sumergió la zona en una sangrienta guerra de desgaste. Todavía hoy el terror sistemático ejercido condiciona la voluntad colectiva de unos pueblos que no se han recuperado de las secuelas. Las desapariciones, los asesinatos políticos, los secuestros, las matanzas y las violaciones forman parte de la estrategia del terror en defensa del libre mercado y del pensamiento único. También los bloqueos económicos, como el que sufre Cuba por defender el carácter socialista de su Revolución, son utilizados como un criminal castigo colectivo que provoca el sufrimiento del pueblo e intenta imposibilitar cualquier alternativa al Libre Mercado.

En estos momentos las multinacionales con sede en Norteamérica pretenden convertir en un gran mercado a su servicio a toda América Latina. De espaldas a los pueblos que dicen representar los gobiernos continúan negociando las condiciones para la creación de un Area de Libre Comercio de las Américas (ALCA) que limitará, aún más, la soberanía de los pueblos en materia de economía. Cuba, excluida a priori, estaría mas aislada ya que el resto de los países estarían mas sujetos a los dictados de Washington. La integración asimétrica de las débiles economías del sur en un gran mercado donde las patentes e intereses del norte queden protegidos es el gran objetivo del ALCA. La dolarización de las economías o la adopción de paridad con el dólar allana el camino y anticipa sus consecuencias; aumento de las desigualdades, la miseria y las políticas represivas.

El Plan Colombia, íntimamente ligado al ALCA, es el paradigma de la globalización en América Latina. Planteado en origen como lucha contra el narcotráfico se inserta ahora en la estrategia "antiterrorista". Se trata de recrear el escenario de la guerra fría; dibujar un gran enemigo de la humanidad que justifique el recorte de libertades, el aumento del gasto militar y la utilización de los ejércitos contra sus propios pueblos. Establecimiento de regímenes cipayos a los que se apoya militarmente y económicamente con créditos condicionados a la aplicación de los dogmas neoliberales. Castigo militar y/o económico a los pueblos que ejerzan su soberanía. En ese marco el Plan Colombia tiene la vista puesta en la Revolución Bolivariana de Venezuela y pretende la derrota militar de la insurgencia colombiana. El Plan Colombia, que está planificado desde Washington, implica créditos de las instituciones multilaterales. El Plan Colombia contempla el reconocimiento de la "sociedad civil" y la creación de interlocutores a la medida de sus intereses. También utilizará masivamente a las oenegés para atenuar algunos efectos de la intervención y de paso comprar/eliminar algunas resistencias. Mientras que a EEUU le reserva la parte estrictamente militar la UE le asigna el papel civil/humanitario de la agresión.

La UE, que comparte con EEUU el modelo social y económico, busca no quedar definitivamente relegada en lo que considera un suculento mercado. Esta "competencia leal" se limita al reparto de riquezas y mercados. Su problema es hacer crecer la parte del pastel que se queda cada uno. La división de roles entre EEUU y UE tiene que ver más con el juego poli bueno / poli malo que con una diferencia real en su concepciones. La UE escenifica su rol de poli bueno con una política de cooperación supuestamente mas generosa y comprensiva con el respeto a los derechos humanos en la que las oenegés juegan un papel fundamental.

Tenemos que tener en cuenta que el desarrollo de este tipo de organizaciones de la llamada "sociedad civil" hay que situarlo en una hábil comprensión por parte del sistema de las potencialidades civiles para complementar las carencias de una forma mundial organizativa caracterizada por la opción capitalista -o liberal, por utilizar la neolengua de Orwell- a ultranza. Como los desajustes brutales del monetarismo crean enormes bolsas de pobreza y de miseria hay que equilibrarlo con el voluntariado primermundista sensible. Las ONGs se convierten así en "tecnócratas de la pobreza" con una dependencia casi total de los poderes públicos y una tendencia reconocida a la renuncia a los ideales, a la corrupción, al pesebrismo, a la prepotencia y al sometimiento a la ideología de las entidades financiadoras.

Se debe emplazar a los gobiernos de la UE y a las sociedades de las que formamos parte el cumplimiento de las resoluciones internacionales suscritas. Es el caso de la defensa de los derechos humanos. La Declaración Universal fue adoptada en 1948, cuando la ONU estaba formada únicamente por 58 Estados y no se había producido aún la descolonización de África y Asia. En 1968 la Proclamación de Teherán puso las cosas en su sitio al afirmar que "como los derechos y las libertades fundamentales son indivisibles, la realización de los derechos civiles y políticos sin el goce de los económicos, sociales y culturales resulta imposible". En 1986 esta Proclamación fue sancionada por la ONU con el voto en contra de los EEUU y la abstención de todos los países que componían entonces la UE, incluido el Estado español. Por lo tanto, esta debe ser una de las principales líneas de presión hacia la UE, que ha hecho caso omiso de la misma a raíz de la firma del tratado de Maastricht, donde se liga la cooperación al desarrollo con el "derecho de injerencia" exigiendo "cláusulas democráticas" en la práctica totalidad de los acuerdos que se firman desde entonces.

Tenemos que acabar con el pensamiento único y parar la ofensiva ideológica que sufrimos. Occidente conquistó el mundo no por la superioridad de sus valores, ideas o religión sino por su superioridad en la aplicación de la violencia organizada. Pretender que los pueblos de todo el mundo deben comprometerse con los valores occidentales de democracia, mercado libre, derechos humanos, individualismo o imperio de la ley es hacer el juego precisamente a los gobiernos de la UE-EEUU a los que se pretende combatir porque nos hace cómplices de la hipocresía, del doble rasero, de la división entre los derechos formales nunca realizadas y las obligaciones reales que son la norma de quienes defienden esas pretensiones universalistas del capitalismo. No hace falta poner ejemplos como la constante agresión a Iraq o la constante vista gorda hacia la represión de Israel contra los palestinos y la ocupación de su territorio; la libertad de comercio que se preconiza a nivel mundial o las subvenciones a la agricultura y a la ganadería occidentales. Tenemos que acabar con el discurso eurocéntrico/etnocéntrico.

En ese contexto se sitúa la citada cumbre. España, que en la UE tiene derecho a veto en lo que se refiere a América Latina, pretende demostrar su influencia sobre los mercados y dirigentes latinoamericanos y aumentarla. En la agenda de la cumbre se incluye desde la tan en boga lucha contra el terrorismo hasta los derechos humanos, la deuda eterna, el medio ambiente, la reforma de la ONU, la corrupción, el narcotráfico o el crimen organizado. También pretende crear una Asamblea Parlamentaria Trasatlántica, que se constituiría tras imponer una Carta Eurolatinoamericana por la Paz en la que se apoyaría la lógica de intervención militar norteamericana. La respuesta política en la que estamos trabajando pretende mostrar la América Latina que no se ve desde las moquetas del poder. América Latina continúa demostrando su capacidad para crear nuevas alternativas y formas de enfrentarse al pensamiento único y el neoliberalismo. No se trata de realizar una "contracumbre" que se limite a mostrar y lamentar la situación o que sea un fin en sí mismo. Frente a la Asamblea Parlamentaria Trasatlántica planteamos el Foro Social Trasatlántico que tendría como objetivos:

· Denunciar la desestructuración social y el fracaso de la aplicación de los dogmas neoliberales.

· Intercambiar experiencias entre los colectivos de base.

· Crear espacios de debate y trabajo colectivo que sirvan a las luchas de los pueblos contra en la Globalización del Capitalismo Salvaje y el Pensamiento Único.

· Mostrar, difundir la enorme riqueza de luchas y resistencias colectivas (La insurgencia colombiana, los zapatistas en Chiapas, la revolución bolivariana en Venezuela, el movimiento contra la base y por la independencia de Vieques, los piqueteros en Argentina, la revolución cubana, los movimientos indígenas, la ocupación de tierras en Brasil, las audiencias públicas, la universidad popular, el movimiento estudiantil de la UNAM en México, los movimientos populares en Centroamérica, Portoalegre, Sao Paolo… ).

En cuanto a los aspectos formales de la respuesta política no se cierra el debate. El espacio queda abierto de forma propositiva, de ningún modo excluyente. Además de las formas mas tradicionales de denuncia y protesta como las charlas-debates y la concentración o manifestación proponemos:

· Mesas abiertas entre colectivos de ambos lados del Atlántico. Mas allá de las charlas formales favorecer los procesos de diálogo e intercambio de experiencias entre los colectivos que luchan tanto en Europa como en Latinoamérica.

· Realización de una Audiencia Pública temática (Por ejemplo: represión). La audiencia pública es un espacio abierto en la zona de despeje de Colombia en la que tod@s pueden expresarse y que el gobierno tiene la obligación de retransmitir. La idea sería convocar la Audiencia en un espacio público y darle la difusión que podamos.

· Escenificación de una Asamblea de la ONU y el Consejo de seguridad. En la línea de las acciones de denuncia pública implementadas en los 7 días de lucha social. Creemos que hay que denunciar el papel que juega la ONU y su Consejo de Seguridad, el funcionamiento antidemocrático del consejo de seguridad y el doble rasero existente con sus resoluciones.

· Juicio popular, denuncia pública o/y boicot a multinacionales europeas/españolas implicadas mas directamente en la imposición del modelo neoliberal en América Latina. BP que ha financiado el paramilitarismo en Colombia como está documentado en el propio Parlamento Europeo. Señalar también el papel que en general cumplen las empresas petrolíferas o eléctricas con el desplazamiento de la población local como Repsol-Ypf o Endesa y el papel globalizador y privatizador de empresas como Aerolíneas Argentinas o Telefónica.

· Actividades culturales.

Desde nuestro punto de vista la realización de un Foro Social Trasatlántico en Madrid, y su preparación, podría suponer un paso más en la articulación y el conocimiento mutuo entre las diferentes realidades, experiencias y luchas "locales" que tienen lugar tanto en Latinoamérica como Europa. Aunque la globalización se impone mas cruelmente en los países de la periferia que en los del centro el modelo es el mismo. La privatización del derecho a la educación o la salud, el deterioro de las relaciones laborales… las agresiones son similares. Los parecidos se vuelven trágicos cuando recordamos el asesinato de Carlo Giuliani a manos de la Policía italiana en el marco de las protestas contra la globalización y el G8 y el mas reciente de Carlos Geovanny a manos de la Policía colombiana cuando protestaba contra la globalización y la Guerra. Ambos deben permanecer en el recuerdo colectivo del movimiento contra la globalización. Queremos reforzar la relación entre el movimiento antiglobalización de ambos lados del Atlántico apoyando el Encuentro Hemisférico de Lucha contra el ALCA (La Habana,13-16 noviembre 2001) y las propuestas con las que se pone en marcha una coordinación continental. Especialmente apoyamos y proponemos la participación en el Segundo Foro Social Mundial de Porto Alegre, el X Encuentro del Foro de Sao Paulo (La Habana, 2-7 Diciembre 2001) y el Segundo Encuentro Internacional de Solidaridad y por la Paz en Colombia y América Latina (México, 4-5 marzo 2002). Recogemos la propuesta de declarar el 28 de marzo Día de Lucha por la Defensa de la Educación Pública y contra el ALCA y del día 17 de Abril como día de la lucha campesina. Apoyamos, también, la propuesta de plebiscito popular contra el ALCA que se impulsará a escala continental.

Vemos positivo e ilusionante, generar un espacio puntual de encuentro entre las múltiples propuestas de acción política, iniciativas sociales y/o económicas, que mediante los principios de la cooperación, la horizontalidad y el apoyo mutuo, se comprometen con la búsqueda de una transformación real de las relaciones entre quienes ejercen el poder y quienes lo padecen, construyendo en su que hacer cotidiano una alternativa que desafía y cuestiona el carácter violento, concentrador y excluyente del modelo de desarrollo que las elites integradas comprometidas con la globalización capitalistas, tratan de imponer con su lógica inhumana, al resto de la humanidad. Por eso también nos planteamos la necesidad de que este espacio de intervención se abra y se asuma como un proceso dinámico en construcción permanente, y se trabaje no sólo hacia dentro de los movimientos sociales y políticos, si no también hacia las gentes que viven en nuestras ciudades, en nuestros barrios. Promover la participación de much@s será posible si se ven reflejados en los contenidos de nuestra iniciativa; tanto en los problemas a los que hacemos frente como a las posibles soluciones, o formas de enfrentarlos. Es decir no queremos mostrar los problemas desde una supuesta lejanía, queremos dotarnos de la capacidad real de transformar "conciencias" y prácticas.

El Foro no pretende autolimitarse al espacio temporal en que se celebre la cumbre de Jefes de Estado de América Latina y UE, por el contrario el planteamiento es respaldar socialmente el Foro con actos, talleres, acciones(…) durante toda la fase previa a la Cumbre oficial. Co mo primera actividad del Foro Social Trasatlántico está prevista la realización de un Encuentro Estatal de Solidaridad con las Luchas de los Pueblos Latinoamericanos en Madrid el día 12 de Enero de 2002.


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